En corto y por derecho

El maestro y Margarita

Durante muchos años el vuelo de Margarita sobre Moscú supuso una metáfora de la ansiada libertad del pueblo ruso bajo la férula de Stalin. La novela ‘El maestro y Margarita’ de Mijail Bulgákov, escrita en los años 30 y publicada en los 60, ha sido objeto de múltiples estudios literarios y políticos en los últimos cincuenta años. Cabe preguntarse cuál es su valor residual en 2025.

Bulgákov, nacido en Kiev, médico de profesión, se trasladó a principios de los años 20 a Moscú donde desarrolló una brillante carrera literaria que se vio pronto ensombrecida por su defensa de los “blancos’, aquellos que perdieron la guerra civil rusa. En 1928 todas sus obras fueron prohibidas, pero su valiente carta de denuncia a Stalin y la llamada telefónica que éste le hizo, le permitió sobrevivir, cierto que mezquinamente, hasta 1940, año que murió en la cama víctima de una enfermedad renal. Le dedicó muchos años a escribir y reescribir su ‘Maestro”, a sabiendas que era impublicable, hasta que su tercera mujer, en la época pos stalinista consiguió que viera la luz.

Sin restarle méritos literarios y políticos, su lectura en 2025 resulta decepcionante. Lo que para los que conocieron el Moscú de los años 30, resultaba vivificador, para el lector actual resulta un texto sin pies ni cabeza. Frente al ‘realismo socialista’, Bulgákov desarrolla un “realismo mágico’ que se antoja grotesco al lector actual. El delirante argumento pretende que el demonio, Voland en la novela, visita Moscú acompañado de un ridículo séquito que incluye un gato parlanchín. Su objetivo es rescatar a un escritor, el llamado Maestro, que ha escrito una novela sobre Poncio Pilatos que la censura ha prohibido. Internado en un psiquiátrico es rescatado gracias a Voland junto con su amante, Margarita. Todos ellos huyen de Moscú a bordo de unas escobas. Cuesta trabajo creerlo, pero este es el argumento que tanto ha dado de sí.

Incluso para un lector masoquista y  estudioso de la Biblia, resulta fatigosa la lectura de ‘El maestro y Margarita”. El relato sobre Poncio Pilatos tiene su interés y afortunadamente ocupa bastantes páginas del libro, pero el resto, a pesar de un prometedor inicio, acaba con la paciencia del sufrido lector.