El Ayuntamiento de Madrid ha rendido este viernes un emotivo homenaje a Rafael Ferrándiz, jefe del Cuerpo de Bomberos de la capital durante los últimos seis años, con motivo de su jubilación tras 41 años de servicio público. El acto, celebrado en presencia de numerosas autoridades y compañeros, ha sido presidido por el alcalde José Luis Martínez-Almeida, quien ha reconocido la “dedicación inquebrantable y compromiso ejemplar” de Ferrándiz con la seguridad de todos los madrileños.
Acompañado por la vicealcaldesa y delegada de Seguridad y Emergencias, Inma Sanz, el alcalde ha subrayado el legado profesional y humano de Ferrándiz, y su papel esencial en la evolución y modernización del cuerpo durante más de cuatro décadas.
Un referente del servicio público
Madrileño de nacimiento, Rafael Ferrándiz ingresó en el Cuerpo de Bomberos del Ayuntamiento en 1984, tras formarse como arquitecto técnico e ingeniero de Edificación. A lo largo de su dilatada trayectoria, ha ocupado múltiples responsabilidades dentro del servicio, destacando como jefe de la Unidad de Buceo, subinspector en áreas de logística, formación y zonas operativas, hasta alcanzar el cargo de jefe del cuerpo en 2019.
Ha intervenido en centenares de emergencias, muchas de ellas clave en la historia reciente de la ciudad. Entre ellas se encuentran el incendio de los Almacenes Arias en 1987, donde perdieron la vida diez bomberos; el incendio del edificio Windsor en 2005, uno de los más complejos por altura y técnicas empleadas; y los atentados del 11 de marzo de 2004, donde tuvo que coordinar acciones en cuatro escenarios distintos.
Reconocimiento institucional y profesional
El acto ha contado con la presencia de destacados representantes institucionales, como el presidente del Pleno y concejal de Moncloa-Aravaca, Borja Fanjul; el concejal del distrito Centro, Carlos Segura; el director general de Bomberos de Madrid, Enrique López Ventura, y el nuevo jefe del cuerpo, Carlos Marín. También han acudido jefes de otros cuerpos de bomberos de la Comunidad de Madrid, así como mandos de la Policía Municipal y Nacional.
Un adiós con gratitud
Ferrándiz se despide con el respeto unánime de sus compañeros y de toda la corporación municipal. Su figura representa la vocación de servicio, la excelencia técnica y la humanidad en una de las profesiones más exigentes. Con este homenaje, la ciudad de Madrid agradece su entrega y ejemplo, que permanecerán como referente para las nuevas generaciones del cuerpo.
