La presidenta de Cantabria, María José Sáenz de Buruaga, ha protagonizado este viernes un desayuno informativo del Nueva Economía Fórum en Madrid en el que, además de repasar los avances de su Gobierno regional, ha lanzado duras críticas contra el Ejecutivo de Pedro Sánchez y contra la figura de Leire Díez, a la que ha acusado de ser “una activista del PSOE” implicada en una campaña de descrédito político y mediático.
"Leire Díez no es una periodista, es una peón del aparato del PSOE", ha sentenciado Buruaga, aludiendo al escándalo que vincula a Díez con supuestas maniobras de desinformación y chantaje relacionadas con la investigación a miembros del Gobierno. La líder cántabra ha asegurado que “en Cantabria todos sabemos quién es quién” y que el relato construido en torno a la periodista no ha calado entre la ciudadanía: “Allí nadie se cree esa película”.
Acompañada por el portavoz del PP en el Congreso, Miguel Tellado, quien ha sido el encargado de introducir su intervención, Buruaga ha recibido elogios por su “ejemplo de vida consagrada al servicio público” y su capacidad para liderar un Ejecutivo “serio, sólido y trabajador”.
Durante su discurso, Buruaga ha repasado los hitos de su gobierno en el ecuador de la legislatura, destacando la Ley de Simplificación Administrativa, la reducción fiscal, el impulso a la colaboración público-privada y una apuesta decidida por el medio rural. “Cantabria está en marcha y acelerando. Tiene rumbo, ritmo y horizonte”, ha afirmado, subrayando que la transformación de una región “no se logra en dos años tras dos décadas de deriva política”.
En un tono marcadamente político, la presidenta cántabra ha mostrado su “enorme preocupación” por el deterioro institucional a nivel nacional, aludiendo a los “escándalos continuos” del Gobierno y asegurando que la situación actual “provoca bochorno”.
"¿En qué democracia sobrevive un presidente con un hermano sentado en el banquillo?", ha preguntado retóricamente, en alusión al caso judicial que afecta a un familiar del presidente Sánchez. En este sentido, ha denunciado la “pobreza democrática” que, en su opinión, define la situación actual del Ejecutivo central.
Tellado, por su parte, ha elevado aún más el tono, calificando al PSOE como una “cloaca mafiosa” y acusándolo de operar “con esbirros que buscan carroña para extorsionar a jueces, fiscales y periodistas”. El dirigente popular ha convocado a la ciudadanía a una manifestación el próximo 8 de junio, bajo el lema de que “España no quiere una mafia, sino democracia”.
También ha lamentado el silencio cómplice de los socios de Gobierno, como Sumar, ERC o PNV, a los que ha acusado de tolerar la corrupción a cambio de favores políticos. “Han pretendido inmunizar al país con tanta corrupción y polarización que ya todo parezca normal”, ha señalado.
En clave institucional, Tellado ha reforzado la figura de Buruaga frente a la de Leire Díez. “Mientras para el PP la cántabra de referencia es una mujer comprometida con el interés general, para el PSOE lo es una activista que se reúne con imputados para ofrecerles tratos con la Fiscalía”, ha sentenciado.
Incluso desde el PSOE se han alzado voces críticas. El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha comparado el caso con una “serie tipo House of Cards pero con actores de la época de Alfredo Landa”, en una ironía que refleja la incomodidad interna del socialismo con este nuevo escándalo.
En contraste, Buruaga ha puesto en valor la gestión del PP en Cantabria, recordando que su Ejecutivo ha aprobado dos presupuestos en dos años, “algo que Pedro Sánchez ni sueña”, ha dicho. También ha criticado la política fiscal del Gobierno central: “Llevan años friendo a impuestos a todos los españoles y negándose a ajustar el IRPF a la inflación o a reducir el IVA de productos esenciales”.
La presidenta cántabra ha cerrado su intervención reiterando su compromiso con la estabilidad institucional, el crecimiento económico y el respeto democrático, distanciándose de lo que considera un modelo de poder “deteriorado y en decadencia”.