El presidente del Gobierno y secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, ha asegurado este sábado que “la derecha conservadora se ha convertido en un satélite de la extrema derecha”, al asumir sus postulados para “garantizar su supervivencia política”, y ha hecho un llamamiento a una movilización progresista mundial para frenar su avance.
Sánchez lanzó este mensaje durante la clausura del Congreso del Partido Socialista Europeo (PES), celebrado en Ámsterdam (Países Bajos) bajo el lema Progressive Mobilisation (Movilización Progresista), un encuentro en el que los líderes socialistas del continente acordaron una respuesta común frente al auge de los movimientos ultraconservadores.
“La derecha clásica se ha rendido al empuje de los ultras”
Durante su intervención, el presidente del Gobierno advirtió que la extrema derecha “avanza por toda Europa y el mundo” difundiendo “mensajes llenos de odio y mentiras”, ante los cuales los socialistas “no pueden rendirse”.
En su análisis, Sánchez afirmó que la derecha tradicional ha renunciado a su independencia ideológica y se limita a “copiar y pegar las ideas y métodos” de la extrema derecha. “Creen que es su única oportunidad para sobrevivir políticamente, pero no pueden ser más ingenuos. Quienes montan a lomos de un tigre acaban en sus fauces”, advirtió.
El jefe del Ejecutivo alertó de que esta estrategia “pone en peligro un consenso de décadas” en Europa y recordó los errores del pasado: “¿Cuántas veces van a tener que repetir los mismos errores que llevaron a Europa al desastre?”.
“Su entreguismo socava los cimientos de la democracia”
Sánchez subrayó que la derecha conservadora, al asumir los postulados de la extrema derecha, “está socavando los cimientos de la democracia”, y acusó a los líderes conservadores de “ceder ante el miedo a ser relegados”.
“La derecha ha comprado todas las ideas de la ultraderecha y cabalga sobre un tigre del que ya no puede bajarse”, denunció. También condenó el acoso y la manipulación en redes sociales, a los que calificó de “instrumentos de ataque de los ultras”, e instó a los progresistas a defender a quienes son perseguidos por alzar su voz.
“No tenemos miedo. Este desafío nos da más fuerza y decisión para luchar por la libertad y la justicia social”, proclamó ante los aplausos de los asistentes al congreso.
Llamamiento a una movilización global progresista
El presidente español aprovechó su intervención para pedir una movilización global de los movimientos progresistas que sirva como contrapeso al auge ultraderechista. “No os pido solo que permanezcamos firmes en nuestras ideas socialistas, sino que nos pongamos en pie por quienes sufren amenazas, con una acción progresista en todos los lugares del mundo”, manifestó.
Sánchez insistió en que el proyecto socialista debe ser coherente para ser creíble y apeló a una defensa universal de los derechos humanos. “Todas las vidas valen lo mismo, en Ucrania y en Gaza. No podemos aceptar dobles estándares que socavan el sistema multilateral”, afirmó.
En este sentido, recalcó que el compromiso de los socialistas debe centrarse en la defensa de la igualdad, la justicia social y la democracia, pilares que, a su juicio, se ven amenazados por el discurso populista y excluyente de la extrema derecha.
“No hay que dar ni un paso atrás”
En el cierre de su intervención, Sánchez pidió unidad y determinación para “no dar ni un paso atrás” ante la ola reaccionaria que, dijo, pretende desmantelar los avances sociales y democráticos logrados en las últimas décadas.
“La extrema derecha no se combate con resignación ni miedo, sino con más democracia, más igualdad y más derechos”, concluyó el líder socialista, reafirmando el papel del socialismo europeo como muro de contención frente al autoritarismo.