La Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil ha implicado al exgerente y actual presidente de la empresa pública Enusa, Mariano Moreno Pavón, en el entramado de pagos en metálico que rodea al exministro de Transportes José Luis Ábalos. Según el informe remitido al juez instructor, el nombre de Pavón aparece por primera vez en la investigación sobre la presunta entrega de sobres con dinero procedente del Partido Socialista Obrero Español (PSOE), en el marco del conocido caso Koldo.
El documento, al que ha tenido acceso El Debate, recoge una conversación intervenida el 26 de junio de 2019 entre Koldo García, exasesor de Ábalos, y su esposa, Patricia Úriz, en la que ambos comentan el pago de 2.000 euros a un chófer del Ministerio de Transportes. La UCO concluye que esa entrega “habría estado supeditada a una conversación entre Ábalos, Santos Cerdán o Mariano Moreno Pavón, en ese momento gerente del partido”.
Pavón, bajo el foco de la UCO
Para los investigadores, esta mención vincula directamente a la gerencia económica del PSOE con los flujos de dinero en efectivo que llegaban al entorno del exministro. Pavón, que entre 2017 y 2021 fue máximo responsable de la tesorería y gestión financiera de Ferraz, controlaba los movimientos de caja y las liquidaciones internas del partido, lo que, según la Guardia Civil, lo situaría en el núcleo operativo de los pagos bajo sospecha.
El informe añade que Koldo pidió a su esposa que consultara a una empleada de la sede socialista, identificada como “Celia”, si debía concretar la entrega del dinero. La respuesta fue tajante:
“Me dice Celia que eso ella no lo va a preguntar, que tiene que hablar Ábalos o Santos con Gerencia”.
Para la UCO, la palabra “Gerencia” hace referencia a Pavón, confirmando su papel como supervisor de las operaciones económicas internas del partido.
Un sistema paralelo de pagos
El contenido del informe refuerza la tesis de los agentes de que existía un sistema estructurado de compensaciones en efectivo dentro del PSOE, ajeno a los registros oficiales. Los investigadores sostienen que parte de esos fondos terminaron en manos de Ábalos entre 2017 y 2021, entregados “mediante sobres recogidos en persona” y, posteriormente, habrían alcanzado también a su entorno familiar.
La UCO apunta incluso a que, en 2022, el hijo del exministro, Víctor Ábalos, habría continuado recibiendo “dinero en metálico de origen desconocido”.
El chófer del Ministerio de Transportes, Eduardo Cantos Valle, habría actuado como intermediario en la distribución de esos fondos, ejemplificado en el pago del 26 de junio de 2019, supeditado a la autorización de los dirigentes implicados.
Un ascenso bajo sospecha
Mariano Moreno Pavón, licenciado en Gestión y Administración Pública, fue gerente del PSOE durante cuatro años y ocupó diversos cargos internos durante casi dos décadas. En diciembre de 2021, fue nombrado presidente de Enusa, empresa pública dedicada al sector nuclear, pocos días después de la destitución de José Vicente Berlanga, un hombre de confianza de Ábalos.
El nombramiento de Pavón, que supuso un sueldo de 245.000 euros anuales, coincidió temporalmente con las primeras pesquisas de la Guardia Civil sobre los pagos en metálico, lo que ha llevado a los agentes a revisar el contexto de su designación y la posible intención de blindarlo políticamente.
Reacciones políticas
El caso ha desatado una nueva ola de reacciones en el panorama político. La portavoz del PP en el Senado, Alicia García, recordó que “ya se ha confirmado la entrega de bolsas de basura con dinero en Ferraz” y adelantó que los gerentes implicados, Mariano Moreno y Ana María Fuentes, comparecerán la próxima semana ante la comisión de investigación.
Por su parte, José Luis Ábalos ha negado cualquier sobresueldo o pago irregular, mientras que desde el Gobierno se guarda silencio institucional a la espera de la evolución judicial del caso.
La investigación continúa
Con la inclusión de Pavón en el último informe, la Guardia Civil amplía el perímetro de la investigación y pone bajo la lupa la cúpula financiera del PSOE, señalando una posible red de pagos en efectivo que habría funcionado entre 2017 y 2021.
La UCO mantiene abiertas las pesquisas para determinar el origen de los fondos y su conexión con una presunta financiación paralela del partido, mientras el juez instructor evalúa nuevas diligencias para esclarecer el alcance del caso.