Madrid ha situado el verde urbano en el centro de su estrategia de ciudad. Desde 2020, el Ayuntamiento ha impulsado 124 actuaciones de creación, mejora y conservación de parques y jardines, con una inversión acumulada cercana a los 109 millones de euros y 106 obras ya finalizadas, según datos oficiales. El giro no es solo cuantitativo: el consistorio defiende que el verde pasa a tratarse como infraestructura esencial para la salud pública, el equilibrio territorial y la adaptación climática.
Un salto de inversión: de 44 a 109 millones en cinco años
El plan 2020–2025 suma cerca de 109 millones de euros para 124 intervenciones, con 106 proyectos terminados a agosto de 2025. En el periodo anterior (2015–2019) se destinaron 44,6 millones, por lo que el salto presupuestario es notable y apunta a un cambio de enfoque que integra el verde como infraestructura urbana de primer orden.
El objetivo político es claro: Madrid 360 incorpora el patrimonio verde como eje de la estrategia climática y sanitaria de la ciudad, alineado con la idea de infraestructura verde continua: corredores, drenaje urbano sostenible, sombra y confort térmico, biodiversidad y uso social.
Los parques que han cambiado en 2025: Pinar del Rey, La Elipa y La Viña
Pinar del Rey (Hortaleza)
Reforma integral de su parque forestal y urbano con 1,2 millones de inversión. Se repuso arbolado dañado por Filomena con 280 árboles y 14.000 arbustos, además de mejoras en accesibilidad, drenaje sostenible, sendas e iluminación. Las zonas infantiles pasan a ser inclusivas.
Pinar de la Elipa (Ciudad Lineal)
Transformación del parque (15,8 ha) con 1,4 millones: 754 árboles y 1.925 arbustos plantados, rehabilitación de caminos con pavimentos permeables, drenaje, dos áreas infantiles accesibles, zonas deportivas y caninas y nuevo mobiliario. Parte del movimiento vecinal ha expresado reservas por una supuesta “dureza” del diseño y por la iluminación, reclamando preservar el carácter forestal.
Parque de la Viña (Puente de Vallecas)
Reforma integral de 43.693 m² con 1,1 millones, nuevos itinerarios, drenaje sostenible y paisajismo orientado a biodiversidad y confort climático, además de 67 árboles y casi 8.000 arbustos.
Un patrimonio verde que ya supera las 6.000 hectáreas
Más allá de las obras puntuales, Madrid declara un patrimonio verde municipal superior a 6.000 hectáreas, equivalente a más de 18 m² por habitante en parques y zonas verdes públicas de gestión local.
En cuanto al arbolado viario, la cobertura alcanza más del 55% de las calles, con un inventario cercano a 300.000 árboles de más de 200 especies distintas. Este esfuerzo ha sido reconocido por la FAO y la Arbor Day Foundation: Madrid es “Tree City of the World” por sexto año consecutivo, la única capital española presente en todas las ediciones del programa.
Proyectos de futuro: del Bosque Metropolitano a nuevas conexiones verdes
La ciudad avanza con el Bosque Metropolitano, un anillo verde de 75 km que conectará áreas forestales y parques periurbanos, con fases activas en varios distritos y partidas específicas en los presupuestos de 2025.
En paralelo, se abren nuevas conexiones peatonales y ciclistas que cosen barrios y zonas industriales, como la de Entrevías al polígono de Vallecas (2,6 millones), pensada también para facilitar accesos a parques y senderos metropolitanos.
Luces y sombras de la estrategia verde
- Impacto de Filomena. La gran nevada de 2021 provocó la pérdida de decenas de miles de árboles. La reposición avanza, pero colectivos y expertos piden reforzar la gestión preventiva y la selección de especies más resilientes.
- Obras con afección arbórea. Proyectos urbanos recientes han reabierto el debate por talas puntuales y compensaciones, subrayando la necesidad de transparencia, balance de carbono y soluciones de drenaje urbano sostenible.
- El debate del Pinar de la Elipa. Parte del vecindario reclama mantener su vocación forestal y reducir la pavimentación. El Ayuntamiento sostiene que la reforma mejora accesibilidad, seguridad y biodiversidad.
Tres retos pendientes para consolidar el modelo en 2026
- Consolidar el arbolado nuevo. Publicar tasas de arraigo por distrito y especie, y ajustar las mezclas hacia variedades más resilientes a olas de calor y sequías.
- Cerrar corredores de sombra. Priorizar la plantación en barrios con déficit de cobertura y calor extremo, vinculándola a caminos escolares y a ejes de movilidad activa.
- Más transparencia y participación. Extender paneles de obra con fichas ambientales y foros de seguimiento con el vecindario en cada intervención.