Parque de las Avenidas

Vecinos del Parque de las Avenidas acusan al Ayuntamiento de “pasividad” por no cerrar un albergue ilegal abierto desde hace tres semanas

Los residentes denuncian que el hostal sigue funcionando sin licencia pese a la orden de cierre y preparan una nueva cacerolada para exigir su clausura

Cacerolada en Parque de las Avenidas contra el Velvet Hostel
photo_camera Cacerolada en Parque de las Avenidas contra el Velvet Hostel

El conflicto por el albergue ilegal del Parque de las Avenidas continúa generando indignación entre los vecinos. El establecimiento, que opera desde hace tres semanas sin licencia municipal, debía haber sido clausurado tras la orden del Ayuntamiento de Madrid, pero sigue abierto, provocando ruido, molestias y una creciente frustración vecinal.

Tres semanas de actividad “clandestina”

Los residentes aseguran que el local hotelero funciona “al margen de la ley” y sin la preceptiva licencia municipal, pese a que el alcalde se comprometió públicamente a su cierre hace más de dos semanas.

Es impensable lo que está ocurriendo”, denuncia Ángel Vallejo, abogado y portavoz de los vecinos, en declaraciones a Buenos Días Madrid. “Han pasado tres semanas desde la orden de cese y el negocio sigue abierto. El Ayuntamiento reconoce que no tiene licencia, pero no actúa”.

El letrado acusa al consistorio de “pasividad” y falta de contundencia, recordando que la actividad “es clandestina y así lo admite el propio Ayuntamiento”. Por ello, los residentes han solicitado hasta cuatro veces la aplicación de medidas cautelarísimas, sin haber recibido respuesta.

Quejas por ruido y contaminación acústica

Además de la falta de licencia, los vecinos denuncian graves problemas de ruido y molestias diarias. “Los aparatos de aire acondicionado están funcionando todo el día, superando los niveles permitidos por la ordenanza de calidad del aire”, lamenta Vallejo.

El abogado insiste en que el Ayuntamiento tiene la obligación de intervenir, ya que la actividad del establecimiento vulnera la normativa municipal de convivencia y salubridad. “Queremos que se cumpla la ley: si el local tiene que estar insonorizado, que lo esté, y si necesita licencia, que cumpla con todos los controles”, añade.

Nueva cacerolada de protesta vecinal

Ante la falta de respuesta institucional, los afectados han convocado una nueva cacerolada de protesta este viernes por la tarde, en la que exigirán el cierre inmediato del establecimiento y mayor firmeza del Ayuntamiento frente a lo que califican de “un desafío abierto a la autoridad municipal”.

No entendemos que siga abierto sin licencia”, protestan los residentes, que ya organizaron varias concentraciones anteriores por las noches sin descanso y el continuo trasiego de huéspedes en la zona.

El Ayuntamiento, sin ejecución efectiva de la orden de cierre

El Ayuntamiento de Madrid dictó una orden de cese de actividad a principios de mes, tras comprobar que el local no contaba con licencia ni con las condiciones exigidas para alojar a clientes. Sin embargo, la orden no ha sido aún ejecutada, y el establecimiento sigue operando con normalidad.

Fuentes municipales alegan que deben respetarse los plazos administrativos y los procedimientos legales antes de aplicar medidas de cierre forzoso. No obstante, los vecinos consideran que el Ayuntamiento dispone de herramientas de urgencia para intervenir de forma inmediata.

Pedimos la aplicación de medidas cautelarísimas, como marca la ley, ante una actividad que el propio Ayuntamiento reconoce como irregular”, insiste el abogado de los residentes.

Vecinos exigen acción inmediata

Los vecinos aseguran sentirse abandonados por la administración, y temen que la falta de actuación siente un precedente peligroso para otros negocios que operen sin permisos. “El hostel lleva tres semanas abierto sin licencia y eso es un desafío al Ayuntamiento. Si no se actúa, se lanza el mensaje de que cualquiera puede incumplir la ley”, advierten.

Los residentes reclaman una intervención inmediata que ponga fin a lo que consideran una situación de impunidad, y piden revisar los protocolos municipales de inspección y cierre de locales ilegales.

No pedimos privilegios, pedimos que se cumpla la norma”, concluye Vallejo. “El Ayuntamiento debe proteger a los vecinos, no al que incumple la ley”.