Crónicas Mexas

Narcos mexicanos

Lamentablemente hoy México no solo es reconocido por su tequila, la amabilidad de su gente y sus bellas playas, sino también por la presencia del narcotráfico. Durante décadas han salido a la luz complicidades entre sectores políticos y estas organizaciones: hay que recordar que hay un ex secretario de Seguridad Pública, detenido por sus vínculos con el narcotráfico, al que el despacho del que soy titular denunció reiterada e infructuosamente. Últimamente periodísticamente se han dado a conocer reuniones de gobernadores con personajes relacionados con los cárteles y fotografías de alcaldes en compañía de presuntos delincuentes se han vuelto tristemente cotidianas.

Lo que, gracias a Dios, ha contribuido a contener el crecimiento de estas organizaciones no ha sido un cambio interno en México, sino un giro en la política de Estados Unidos, promovido por Donald Trump, al que la presidenta Claudia Sheinbaum y su secretario de Seguridad Pública han tenido que adaptarse. La marea de muertes causadas por el tráfico de fentanilo en el país del norte ha obligado a ese gobierno a actuar; cabe recordar que este negocio sangriento también se alimenta del flujo ilegal de armas desde Estados Unidos hacia México, armas que han sembrado de violencia nuestras comunidades.

Con la política trumpista, Estados Unidos dispone de una cantidad de información sin precedentes sobre los cárteles que operan en México, ya que buena parte de los narcotraficantes de alto perfil están detenidos o procesados allí. Podría decirse que solo falta capturar a Nemesio Oseguera Cervantes, alias “el Mencho”.

Estas son algunas de las figuras más destacadas:

  • Erick Valencia Salazar, conocido como el “85”, ex socio de “el Mencho” y uno de los fundadores del Cártel Jalisco Nueva Generación, probablemente la organización más fuerte actualmente en México. Fue detenido por primera vez en 2012; ganó un juicio contra el Estado y quedó libre en 2017. En 2022 fue recapturado y extraditado a Estados Unidos, donde se encontraría negociando con las autoridades. Según fuentes cercanas, su hermano Ismael Valencia Salazar también estaría buscando un acuerdo con la justicia norteamericana.
  • Joaquín Archivaldo Guzmán Loera, apodado “el Chapo”, originario de Badiraguato, Sinaloa. Fue capturado en dos ocasiones y se fugó ambas veces, la última mediante un espectacular túnel. Es uno de los fundadores del Cártel de Sinaloa, junto a Ismael “El Mayo” Zambada. Finalmente fue detenido por autoridades mexicanas y extraditado a Estados Unidos, donde permanece recluido.
  • Ovidio Guzmán López, alias “el Ratón”, hijo del Chapo. Su primera detención en Culiacán, Sinaloa, desató una ola de violencia; grupos armados del Cártel de Sinaloa sembraron el terror en la ciudad y el presidente Andrés Manuel López Obrador ordenó liberarlo, gesto que le valió duras críticas, sumado al hecho de haber saludado a la abuela del capo y visitar varias veces Badiraguato. Ovidio fue recapturado posteriormente y enviado a Estados Unidos, donde negoció un acuerdo de colaboración que lo benefició a él y a varios familiares que cruzaron la frontera.
  • Ismael Mario Zambada García, conocido como “el Mayo”, es a juicio de muchos la figura más icónica del narcotráfico mexicano. Se inició como mueblero antes de dedicarse al trasiego de drogas. Nunca fue detenido por las autoridades mexicanas. Sobre su captura la versión más difundida es la que dice que lo puso el gobernador de Sinaloa, junto con Joaquin Guzman Lopez (hijo del “Chapo”) que mataron a sus escoltas y lo obligaron a abordar el avión que viajó a Texas donde los dos narcotraficantes (el hijo del chapo y el mayo) fueron detenidos. Según informaciones que circulan en la prensa, recientemente habría llegado a un acuerdo ante un tribunal de Estados Unidos para declararse culpable, pagar una reparación de 15 000 millones de dólares y así evitar la pena de muerte.
  • Servando Gómez Martínez, alias “La Tuta”, es un michoacano que pasó de ser docente a encabezar una de las organizaciones criminales más peligrosas de México, primero la Familia Michoacana y luego los Caballeros Templarios. Ganó poder después de que sus operadores quedaran libres gracias a una batalla legal contra el gobierno, en medio de tensiones con la administración de Felipe Calderón, las cuales detallo en un artículo de este periódico llamado “Ira”. Posteriormente fue capturado y recientemente extraditado a Estados Unidos, donde se encuentra ahora.

En mi opinión, estos son los narcotraficantes mexicanos más relevantes que actualmente se hallan bajo control de las autoridades estadounidenses, lo que coloca a Washington en una posición de fuerza e información sin precedentes.