El Frente Obrero ha convocado una concentración el próximo 6 de diciembre, Día de la Constitución, frente al Congreso de los Diputados para denunciar lo que consideran una “corrupción generalizada” en las instituciones del Estado y reclamar el fin del denominado régimen del 78. La protesta tendrá lugar a las 17:15 horas, entre la Plaza de las Cortes y la calle Cedaceros, según recoge el cartel difundido por la organización junto a un manifiesto de marcado carácter político.
La convocatoria se produce en un contexto en el que el partido denuncia un “deterioro político y social insostenible”. En su mensaje público, el Frente Obrero acusa al Gobierno y a distintos dirigentes de amparar una estructura que “ha permitido el saqueo y la destrucción de lo que es de todos”. El cartel, que incluye la imagen del presidente Pedro Sánchez acompañado de otros responsables políticos, aparece bajo el lema “Haz que caigan”, una apelación directa a la movilización social.
Un manifiesto contra la corrupción y el sistema político actual
En el texto que acompaña a la convocatoria, la organización sostiene que “la corrupción que atraviesa el Gobierno actual es intolerable y Sánchez debe dimitir”, aunque subraya que el problema “va más allá de un partido” y responde a una “estructura enquistada desde el régimen del 78”. A juicio del Frente Obrero, este modelo político es “incapaz de regenerarse”, lo que justifica la necesidad de un cambio profundo.
El manifiesto rechaza cualquier división ideológica clásica y presenta la protesta como una confrontación “entre quienes levantan este país y una clase política copada por vividores”. Concluye con un llamamiento directo a la movilización: “Este 6 de diciembre tienes la oportunidad de decírselo a la cara. ¡Haz que caigan!”.
Reclamo de un proceso constituyente
El partido, liderado por Roberto Vaquero, insiste en la necesidad de iniciar un proceso constituyente para redactar una nueva Constitución “votada por una mayoría social”. Consideran esta vía imprescindible para revertir lo que definen como la “decadencia económica y la pérdida de soberanía nacional” que, según su diagnóstico, han convertido a España en un país “desindustrializado y dependiente de la Unión Europea”.
La concentración del 6 de diciembre se perfila así como una acción central en la estrategia del Frente Obrero, que busca situar en el debate público la discusión sobre el modelo de Estado y la legitimidad del sistema surgido tras la Transición.
