El Foro Judicial Independiente (FJI) ha concluido su XX Congreso en Ourense con una serie de resoluciones destinadas a abordar los principales retos del sistema judicial español y reforzar la independencia de los jueces. Entre las medidas acordadas, destaca la intención de valorar la presentación de una queja ante el Parlamento Europeo para instar a un procedimiento de infracción contra España, motivado por las carencias en la independencia judicial y la insuficiencia de medios en el sistema.
En cuanto a los nombramientos discrecionales en el ámbito judicial, el FJI ha decidido ratificar el recurso presentado contra las bases de las convocatorias realizadas tras la renovación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), al considerar que estas no se ajustan a la legalidad vigente. Asimismo, se exige al CGPJ que establezca una regulación adecuada sobre la reducción de jornada, adaptada a las particularidades de la carrera judicial, para facilitar la conciliación familiar y la protección de la salud laboral de los jueces.

Con el objetivo de apoyar a futuros aspirantes a la carrera judicial y fiscal, el FJI ha anunciado la creación de una bolsa de preparadores formada por asociados que ofrecerán asistencia gratuita a quienes no dispongan de recursos económicos para contratar formación. Además, la asociación ha reiterado su rechazo al modelo productivista que premia únicamente el número de sentencias dictadas, argumentando que este enfoque perjudica la calidad de la justicia, la salud laboral de los jueces y degrada la función judicial.
En relación con las retribuciones, el FJI ha reclamado al Ministerio de Justicia el cumplimiento íntegro de los acuerdos alcanzados en mayo de 2023, que incluyen el pago de retribuciones variables y la creación de nuevas plazas judiciales. Ante la falta de avances, no descartan reanudar medidas de conflicto colectivo. También han criticado la postura del Ejecutivo, que atribuye los problemas de la justicia a su organización interna, insistiendo en que la raíz del problema radica en el insuficiente número de jueces.

Por otro lado, el FJI ha manifestado su oposición a que los jueces sustitutos ingresen en la carrera judicial sin superar los cauces legalmente establecidos, como el sistema de oposición y el cuarto turno. Asimismo, la asociación ha condenado las declaraciones de responsables políticos que atacan la labor de jueces implicados en casos de corrupción y los intentos de deslegitimar el poder judicial, considerando que estas acciones socavan la confianza ciudadana en la justicia y debilitan la democracia.
Finalmente, se ha renovado la presidencia de la asociación, siendo elegido Fernando Portillo Rodrigo, juez decano de Melilla, y se han designado nuevos vocales para continuar trabajando en defensa de la independencia judicial y la mejora de las condiciones de la carrera judicial.