Juventud

Independizarse en España: el 30% de los jóvenes necesita ayuda familiar para pagar su vivienda

Un 30% de los jóvenes que han conseguido independizarse en España necesita apoyo económico de sus familias para costear su vivienda, una cifra que se dispara al 50% entre aquellos de entre 18 y 21 años.
Vivienda - Foto wayhomestudio
photo_camera Vivienda - Foto wayhomestudio

Así lo revela el informe ‘Un problema como una casa’, presentado este jueves por el Consejo de la Juventud de España (CJE), en el que se analiza el acceso de los jóvenes a la vivienda y sus condiciones de vida.

La emancipación juvenil, un reto en España

El estudio destaca que la combinación de empleo precario, desigualdad de ingresos y precios elevados en el mercado inmobiliario ha convertido a España en uno de los países europeos donde los jóvenes tardan más en independizarse.

En 2023, la edad media de emancipación fue de 30,4 años, en contraste con la media europea de 26,3 años. Países como Dinamarca y Suecia registran cifras significativamente inferiores, con 21,8 años de media.

Los datos del Observatorio de Emancipación del CJE reflejan que, en el primer semestre de 2024, solo el 14,8% de los jóvenes españoles habían abandonado el hogar familiar, la tasa más baja desde 2006. Este retroceso se ha producido a pesar del descenso del paro juvenil y del incremento del salario mediano, en un contexto de encarecimiento del precio del alquiler (13,6%) y de la vivienda en propiedad (5,7%).

Alquiler, la opción mayoritaria

El 68,9% de los jóvenes emancipados reside en régimen de alquiler, una proporción que asciende al 74% en la franja de 18 a 21 años. Por su parte, el 14,9% ha adquirido una vivienda mediante hipoteca, mientras que el 10,7% ha logrado comprar una casa sin financiación. Un 5,5% de los jóvenes habita en una vivienda cedida gratuitamente.

Entre los motivos de emancipación, el 60% declara haberlo hecho por elección propia, cifra que se eleva al 75% en el caso de quienes poseen una vivienda en propiedad. El 20% de los jóvenes se independiza por razones académicas y el 17,5% por motivos laborales.

Dificultades económicas y dependencia familiar

La precariedad laboral y los altos precios de la vivienda obligan a muchos jóvenes a depender de su entorno familiar para mantenerse emancipados. El 70,6% cubre el coste de su hogar con ingresos propios, pero el 30% necesita apoyo económico externo: el 18,2% combina sus recursos con los de un familiar y el 11,2% depende exclusivamente de terceros.

En cuanto al coste del alquiler, el 37,5% de los jóvenes paga más de 450 euros al mes, mientras que el 33% abona entre 300 y 450 euros y el 29,5% menos de 300 euros. Además, el 41,5% ha tenido que afrontar fianzas superiores a los 600 euros y el 54,1% ha pagado comisiones a agencias inmobiliarias.

Hipotecas y plazos de pago

Los jóvenes que han adquirido una vivienda mediante hipoteca tardarán una media de 17,7 años en liquidar su deuda. El 31,1% prevé amortizarla en menos de 10 años, el 32% en un periodo de entre 10 y 20 años, y el 37% necesitará más de dos décadas para completarlo.

Para acceder a una hipoteca, los jóvenes han necesitado aportar una entrada media de 21.142 euros. Casi el 40% entregó menos de 10.000 euros, mientras que el 32,7% superó los 20.000 euros. Además, el 43,1% requirió ayuda de familiares para afrontar esta inversión.

El impacto en la calidad de vida

El informe del CJE también analiza las condiciones de las viviendas de los jóvenes emancipados. Mientras que el 71% de los propietarios cuenta con salón independiente, terraza o balcón, este porcentaje se reduce al 66,5% entre quienes viven de alquiler.

Asimismo, el 87% de los jóvenes comparte vivienda, con un 42,4% residiendo con tres o cuatro personas. Solo el 13% puede permitirse vivir en solitario. Entre las razones para compartir hogar, el 40,9% menciona la necesidad de repartir gastos y el 37,9% lo hace por preferencia personal.

Un panorama complicado con pocas soluciones

El 81,9% de los jóvenes encuestados asegura que compraría una vivienda si tuviera la oportunidad, pero la realidad económica limita esta posibilidad para la mayoría. Mientras tanto, el acceso al alquiler sigue siendo una odisea marcada por altos precios y condiciones poco favorables.

El Consejo de la Juventud de España advierte que la falta de políticas efectivas en materia de vivienda seguirá retrasando la edad de emancipación y aumentando la dependencia de los jóvenes respecto a sus familias, lo que a largo plazo podría tener consecuencias negativas en la estructura social y económica del país.