Madrid vivió este jueves una de las protestas más multitudinarias en apoyo a Palestina. Unas 10.000 personas, según la Delegación del Gobierno, se concentraron para exigir la liberación inmediata de los activistas de la Global Sumud Flotilla, interceptada por Israel cuando navegaba rumbo a Gaza con ayuda humanitaria.
La movilización arrancó a las 19:00 horas en la Plaza de la Provincia, frente al Ministerio de Exteriores, donde se leyó un manifiesto que denunciaba que “el asalto a la flotilla no nos intimida, nos convoca” y que recordaba que “la solidaridad no se negocia ni se suplica, se ejerce”.
Una marcha por el centro de la capital
Tras la lectura del texto, la marcha avanzó por Atocha, Puerta del Sol y Carrera de San Jerónimo, para finalizar en la Fuente de Neptuno. Durante el recorrido, se corearon consignas contra el bloqueo a Gaza, se pidieron sanciones a Israel y se reclamó un embargo de armas, además de exigir la ruptura de relaciones con el “Gobierno sionista”.
En la Puerta del Sol, los asistentes gritaron contra Isabel Díaz Ayuso y José Luis Martínez-Almeida, a quienes acusaron de despreciar la iniciativa humanitaria. Ayuso había calificado la flotilla como una “asamblea de facultad flotante”. La dirigente de Sumar, Lara Hernández, pidió a la presidenta madrileña que “respete a los héroes y heroínas que se embarcaron” y reclamó al Gobierno central que “proteja a los activistas secuestrados por Israel”.
Protestas pacíficas con momentos de tensión
Aunque la manifestación se desarrolló en un ambiente mayoritariamente pacífico, alrededor de las 22:00 horas la Policía Nacional desalojó la zona de Neptuno tras producirse incidentes entre un grupo de manifestantes y los antidisturbios. Según la Delegación del Gobierno, un hombre fue detenido por desórdenes públicos, lesiones y atentado a la autoridad.
Los agentes utilizaron gases lacrimógenos y dispersaron a decenas de personas que lanzaban objetos y volcaban contenedores en calles cercanas como Cervantes y Recoletos.
Movilización en toda España y paros en la educación
La protesta de Madrid se sumó a las celebradas en Barcelona, Bilbao, Pamplona y Valencia, donde miles de personas exigieron la apertura de un corredor humanitario hacia Gaza y denunciaron el “genocidio” israelí. En paralelo, más de 4.000 estudiantes se manifestaron en Madrid por la mañana, en el marco de una huelga convocada por el Sindicato de Estudiantes bajo el lema “Pararlo todo para parar el genocidio”.
Además, este viernes 3 de octubre se celebran paros en la enseñanza pública madrileña convocados por sindicatos como CCOO, UGT, CGT y STEM, agrupados en la plataforma Marea Palestina: La educación contra el genocidio. La Comunidad de Madrid ha fijado servicios mínimos en centros de Infantil, Primaria, Secundaria y Educación Especial para garantizar la atención a los alumnos.
Con esta movilización, la capital se une a la ola de protestas internacionales contra el bloqueo a Gaza y el asalto a la flotilla, en un contexto en el que la presión social y política hacia Israel sigue creciendo.