La Comunidad de Madrid ha reforzado su apuesta por la innovación en el sector vitivinícola a través de un programa de intercambio internacional que ha llevado esta semana a 15 agricultores de la región hasta la localidad francesa de Montpellier. El objetivo: conocer de primera mano nuevas técnicas de cultivo sostenible y enriquecer su formación mediante el contacto directo con centros de referencia europeos en el ámbito de la enología.
La iniciativa, impulsada por el Gobierno regional dentro del Plan de Dinamización del Sector Primario, busca fomentar el relevo generacional y mejorar la cualificación del personal dedicado al campo madrileño. El viceconsejero de Medio Ambiente, Agricultura y Ordenación del Territorio, Rafael García, ha visitado este miércoles el Instituto de la Vid y el Vino del sur de Francia para acompañar a los profesionales en una de sus sesiones formativas.
Durante su estancia, que comenzó el pasado 7 de julio, los viticultores han participado en visitas guiadas a bodegas y viñedos, así como en encuentros con expertos locales, intercambios técnicos y sesiones teóricas en instalaciones especializadas como el Centro Internacional de Altos Estudios Agronómicos Mediterráneos (CIHEAM Montpellier).
Formación e innovación para fortalecer el campo madrileño
El viaje forma parte de un programa internacional que busca comparar modelos de producción, establecer vínculos profesionales con instituciones extranjeras y mejorar la competitividad del sector vinícola en la Comunidad de Madrid. Esta actividad se enmarca, además, en una conmemoración especial: 2025 ha sido declarado Año del Enoturismo en la región, coincidiendo con el 35º aniversario de la Denominación de Origen Protegida (DOP) Vinos de Madrid y el décimo aniversario de la Asociación Madrid Rutas del Vino.
En este contexto, el Ejecutivo autonómico ha destinado más de cinco millones de euros a actuaciones relacionadas con la promoción, formación y apoyo a municipios rurales con tradición vinícola. La finalidad es clara: consolidar el turismo enológico y fomentar la sostenibilidad en el proceso de elaboración.
“El campo madrileño tiene mucho que decir en el ámbito internacional, y este tipo de experiencias permiten a nuestros productores adquirir nuevas herramientas y puntos de vista que luego aplicarán en sus propias explotaciones”, ha subrayado García durante su visita.