Fronteras desdibujadas

La palabra como puente: la ANLMI lleva literatura, arte y educación a las Naciones Unidas

Nueva York, 23 de junio de 2025. En un contexto internacional marcado por la agudización de los conflictos bélicos, la polarización ideológica y los desafíos éticos que plantea la inteligencia artificial, la necesidad de abrir espacios de diálogo cultural se vuelve cada vez más urgente. Con esta convicción, la Academia Norteamericana de Literatura Moderna Internacional (ANLMI) celebró su Tercer Congreso Mundial en la sede de las Naciones Unidas en Nueva York, con el respaldo de la Misión Permanente de Guinea Ecuatorial.

Bajo el lema “Las artes como vínculo de cooperación cultural para el desarrollo de la educación entre los pueblos”, el encuentro reunió a ministros, embajadores, académicos, artistas y escritores de diversos países. El evento se llevó a cabo el 23 de junio en la sala CR-8 de la ONU. 

La presidenta fundadora de la ANLMI, Rosalía de la Soledad, inauguró el congreso junto al Excmo. Embajador Anatolio Ndong Mba, representante de Guinea Ecuatorial ante la ONU. En su discurso de apertura, destacó la importancia de la literatura, la educación en valores y las expresiones artísticas como herramientas de transformación social. “Este es un espacio de intercambio, de reflexión, pero sobre todo de compromiso con la paz y la formación de ciudadanos íntegros”, afirmó.

Naciones Unidas
Naciones Unidas

Durante las jornadas, se desarrollaron varios paneles en los que se abordaron temas como el rol del arte en la educación, la preservación de las lenguas y culturas, la espiritualidad y tolerancia religiosa, y los desafíos éticos del uso de la inteligencia artificial en contextos pedagógicos.

La participación española tuvo una destacada representación a través de las académicas del Capítulo Reino de España de la ANLMI:  Gloria Nistal, Dolores García, Sandra Blanca Aranda, María del Carmen Aranda y mi persona, Nery Santos. 

Dolores García hizo un innovativo estudio del cuadro de la Monalisa y los pigmentos que se usaron para pintarlo, al hacer este estudio se descubre un puente cultural en su diseño.  Sandra Blanca destacó con grandes ideas sobre la importancia  del arte en la educación. María del Carmen Aranda, vicepresidenta del capítulo y coordinadora nacional, lideró un panel centrado en estrategias educativas humanistas con una fuerte dimensión literaria y emocional.

Muy significativa la ponencia de Gloria Nistal Rosique quien manifestó: “el intercambio artístico produce empatía, comprensión, acercamiento, fomenta la inclusión y erradica la xenofobia”. Por mi parte abordé la relación entre arte, identidad y resiliencia cultural.

Entre otras ideas pude compartir: “En tiempos de ruido, de algoritmos y de ruptura, el arte es un lenguaje que todavía puede recordarnos que somos humanos. Que el otro importa. Que la palabra puede unir más que dividir.”

La jornada cerró con un llamado conjunto a promover la educación integral, aquella que no solo transmite conocimiento, sino que también forma conciencia crítica, sensibilidad y valores. La literatura, la poesía, el arte visual y las narrativas culturales fueron reivindicadas como pilares indispensables para la convivencia en el siglo XXI.

Este congreso no solo reafirma la vocación humanista de la ANLMI, sino que evidencia el valor de la diplomacia cultural como camino posible —y urgente— hacia un mundo más justo y dialogante.