“No vamos a parar hasta lograr justicia”: Juntos Policía Nacional y Guardia Civil reclama equiparación salarial, jubilación digna y reconocimiento como profesión de alto riesgo

Más de 20.000 agentes respaldan ya el movimiento JUNTOSPOLGC, que este 13 de diciembre convoca una gran movilización en el centro de Madrid. Su presidente, Martín Rodríguez, explica por qué consideran que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado viven una situación límite: desigualdad salarial, pérdida del principio de autoridad, ausencia de respaldo jurídico y agresiones crecientes. Una conversación en profundidad sobre un problema que, según denuncian, la Administración lleva décadas sin resolver.

Martín Rodríguez, presidente de JUNTOSPOLGC
photo_camera Martín Rodríguez, presidente de JUNTOSPOLGC

Un movimiento que nace del hartazgo: “Llevamos años esperando justicia”

JUNTOSPOLGC es un movimiento reciente, pero su respaldo crece a un ritmo inusual. Más de veinte mil agentes forman ya parte de una asociación que, según explica su presidente, nace de la necesidad de unir fuerzas ante reivindicaciones históricas nunca atendidas.

“Esta asociación surge como una reacción necesaria. Buscamos agrupar a policías y guardias civiles en una lucha común: la equiparación salarial plena, una jubilación digna sin pérdida de poder adquisitivo y el reconocimiento de la profesión como de alto riesgo”, resume Martín.

No son peticiones nuevas, pero sí urgentes. En 2018 se anunció un avance salarial que, según denuncian, quedó a medias. Desde entonces, poco ha cambiado. Y en algunos aspectos, dicen, la situación ha empeorado.

La convocatoria del 13 de diciembre: “Necesitamos que el ciudadano sepa lo que está pasando”

La asociación ha convocado este 13 de diciembre a las 11:00 horas en la Plaza de Callao una manifestación que recorrerá Gran Vía hasta la calle Montera. El objetivo, explica Martín, es “visibilizar una injusticia que afecta a quienes garantizan la seguridad nacional”.

“Pedimos el apoyo de compañeros, familiares, amigos, simpatizantes y ciudadanos. No vamos a parar hasta que la Administración atienda unas demandas que son de puro sentido común.”

Pérdida de autoridad y agresiones crecientes: “Agredir a un agente tiene coste cero”

Uno de los elementos más presentes en la conversación con Martín es la pérdida del principio de autoridad, un fenómeno que vincula directamente con el aumento de agresiones a agentes, tanto en servicio como fuera de él.

“Las agresiones se han disparado y no tenemos el apoyo jurídico necesario. Asesinaron a guardias civiles en Barbate. Han atacado a compañeros con armas largas. Se están dando palizas a policías fuera de servicio. Parece que agredir a un agente se ha convertido en algo sin consecuencias”, lamenta.

Desde su punto de vista, esta situación no solo compromete la seguridad de quienes patrullan las calles: debilita el propio sistema de protección ciudadana.

“Para dar un servicio de calidad al ciudadano, primero debemos estar nosotros protegidos. Si la ley no nos respalda en nuestras intervenciones, estamos dejando desprotegida a la sociedad.”

Falta de medios en intervenciones críticas: el caso Barbate como punto de inflexión

Martín recuerda episodios recientes que, a su juicio, ejemplifican el deterioro de las condiciones operativas.

“En Barbate se envió a compañeros prácticamente sin medios adecuados a enfrentarse a narcolanchas que duplicaban sus capacidades. No se puede enviar a agentes a una situación así sin herramientas. Eso no es solo falta de previsión; es poner en riesgo sus vidas.”

La asociación sostiene que el Estado debe actualizar los recursos, la formación y los protocolos en consonancia con la peligrosidad real de las intervenciones que afrontan.

Una equiparación que nunca llegó: diferencias de hasta 600 euros mensuales

La equiparación salarial es, quizá, la reivindicación más conocida. Pero Martín insiste en que se suele subestimar la magnitud de la diferencia.

“Un mosso d’Esquadra puede ganar 600 euros más al mes que un policía nacional. Y en jubilación, la diferencia llega a los 700 euros. Mientras tanto, policías nacionales y guardias civiles dependemos de clases pasivas y perdemos ese poder adquisitivo cuando nos retiramos. ¿Cómo puede vivir alguien con una reducción así tras toda una vida de servicio?”

La asociación recalca un dato que consideran revelador: el 80% del salario de los Mossos lo paga también el Ministerio del Interior.

“Es incomprensible que el propio Ministerio financie mayoritariamente ambas nóminas y aun así exista esta brecha.”

Europa ya ha dado un paso: “La Comisión Europea pide que seamos reconocidos como profesión de alto riesgo”

JUNTOSPOLGC recuerda que la Comisión Europea ha pedido recientemente que ciertas agresiones a agentes sean consideradas como eurodelitos, y que la profesión sea reconocida no solo como de riesgo, sino como de alto riesgo.

“Europa lo ha entendido. Falta que lo entienda nuestra propia Administración”, subraya Martín.

El reconocimiento de alto riesgo tendría implicaciones inmediatas en materia salarial, de jubilación y de protección legal.

Apoyo ciudadano sí; apoyo institucional no: “Somos apolíticos, pero no nos vamos a callar”

Sobre el respaldo político, Martín evita encuadres partidistas y recalca la neutralidad del movimiento.

“El ciudadano de a pie nos apoya, siempre lo ha hecho. Lo que no tenemos es apoyo institucional. Somos una asociación apolítica y asindical. Si criticamos al Gobierno actual es porque es el que gobierna. No pedimos privilegios ni nos movemos por ideología. Lo que reclamamos es justicia.”

El presidente lamenta declaraciones recientes de responsables públicos que, a su juicio, “menosprecian” el trabajo policial.

“Que un senador diga que la profesión de riesgo hay que ganársela día a día, o que la vicepresidenta ponga en duda nuestro trabajo en la atención a víctimas de violencia de género… Eso duele. Y no refleja la realidad del trabajo impecable que hacen Policía Nacional y Guardia Civil.”

Un mensaje claro: justicia, igualdad y reconocimiento

Martín resume las reivindicaciones en una frase: “A igual trabajo, igual salario”.

Y añade la lista que consideran irrenunciable:

  • Equiparación salarial plena
  • Reconocimiento como profesión de alto riesgo
  • Jubilación sin pérdida de poder adquisitivo
  • Amparo jurídico en intervenciones
  • Recuperación del principio de autoridad

“No pedimos nada extraordinario. Pedimos justicia e igualdad. Nada más.”

Llamamiento final: “Que la sociedad salga con nosotros a la calle”

La conversación concluye con un mensaje directo:

“Mañana, 13 de diciembre, pedimos a todos los ciudadanos que apoyen a su Policía Nacional y a su Guardia Civil. Que vengan a Callao. Unidos haremos fuerza en las calles y haremos saber que no vamos a parar hasta que se reconozca lo que es justo”.