Red Eléctrica de España (REE) ha lanzado una alerta sobre la estabilidad del sistema eléctrico nacional tras detectar “variaciones bruscas de tensión” en las últimas semanas. Ante el riesgo de un nuevo apagón y un posible impacto en la seguridad del suministro, el operador ha solicitado a la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) la aprobación urgente de medidas excepcionales para reforzar la red.
En un documento remitido a la CNMC, REE advierte de que las oscilaciones registradas, aunque dentro de los márgenes establecidos, podrían provocar desconexiones de demanda o generación que lleguen a desestabilizar el sistema eléctrico nacional. Estas alteraciones, según el operador, se relacionan con “cambios bruscos en los programas de generación renovable” y con el “tiempo de respuesta de las unidades de control dinámico de tensión”.
El gestor ha pedido que las modificaciones propuestas sean sometidas a audiencia pública y que se aprueben de forma “temporal y excepcional”, dada la urgencia de la situación.
Medidas para reforzar la red
Entre las medidas planteadas, REE propone endurecer los procedimientos de operación del sistema, incluidos los procesos de programación, restricciones técnicas, regulación secundaria y control de tensión. Estas actuaciones buscan minimizar desequilibrios de energía en tiempo real, obligando a las compañías a mantener reservas de capacidad y aportarlas a los mercados de balance, lo que evitaría reducciones imprevistas en la potencia disponible.
También plantea aumentar en un 90% el número de muestras de validación en el servicio de control de tensión y elevar el muestreo en cada periodo en 60 valores adicionales, con una vigencia inicial de 30 días y posibilidad de prórroga de 15 días más.
Aunque estas medidas podrían reducir la oferta y la competitividad en el mercado eléctrico, generando un posible encarecimiento de los precios, la CNMC ha abierto un periodo de audiencia pública hasta el 15 de octubre para recibir alegaciones y evaluar su impacto real sobre el sistema y los consumidores.
Red Eléctrica pide calma: “No hay riesgo de apagón inminente”
Pese a la alarma generada, Red Eléctrica ha querido lanzar un mensaje de tranquilidad. En un comunicado, la empresa pública ha subrayado que “no existe riesgo de apagón inminente ni generalizado”, y que las medidas solicitadas tienen un carácter preventivo, destinado a reforzar la robustez y la fiabilidad del sistema eléctrico.
“Hemos detectado variaciones de tensión que deben evitarse, pero no han supuesto riesgo de suministro por haber estado dentro de los límites admisibles”, explicó REE, que asegura que actúa como siempre, “proponiendo las medidas necesarias para mitigar cualquier posible desequilibrio”.
Las causas: más renovables y una red al límite
Según el operador, la evolución reciente del sistema ha provocado “nuevas dinámicas” derivadas del rápido crecimiento de las energías renovables y la alta concentración de instalaciones conectadas mediante electrónica de potencia. Estas infraestructuras son capaces de modificar su producción en cuestión de segundos, lo que aumenta la inestabilidad en la red si no existen mecanismos de compensación suficientes.
La penetración masiva de las renovables, unida al aislamiento energético de España, con limitadas interconexiones con Europa, agrava el riesgo de saturación y de colapsos temporales del sistema eléctrico, como el apagón del pasado 28 de abril, que dejó a millones de personas sin luz durante varias horas.
Por ello, REE insiste en la necesidad de acelerar las inversiones en modernización y almacenamiento energético, así como de actualizar los procedimientos de control para garantizar un suministro estable y seguro en un contexto de transición energética.