La Comunidad de Madrid ha cerrado con éxito la 42ª edición del Festival de Otoño, registrando cifras récord de asistencia con 18.000 espectadores y una ocupación del 90%. Este evento cultural, que se ha convertido en un referente internacional, ha contado este año con la dirección artística de Pilar de Yzaguirre, en un homenaje a su legado en el panorama escénico madrileño.
Durante esta edición, 19 funciones agotaron las entradas, mientras que 39 alcanzaron aforos superiores al 90%. La programación incluyó 27 espectáculos de teatro, danza, música y performance, que se presentaron en diversos escenarios de Madrid y en municipios como Móstoles, San Lorenzo de El Escorial, Alcorcón, Parla, Pozuelo de Alarcón, entre otros.
Un evento de referencia internacional
El consejero de Cultura, Turismo y Deporte, Mariano de Paco Serrano, destacó el carácter de referencia cultural internacional del festival, subrayando la excelencia artística de la propuesta liderada por Pilar de Yzaguirre, a quien calificó como una pionera en la renovación de las artes escénicas contemporáneas en España.
El festival reunió a artistas de renombre como Amancio Prada, Robert Lepage, Wadji Mouawad, Rafael Spregelburd, Tim Etchells, y María Hervás, entre otros, ofreciendo una experiencia artística diversa y de gran calidad.
Nueva dirección y enfoque en 2025
De cara a 2025, el Festival de Otoño tomará un nuevo rumbo bajo la dirección de la mexicana Marcela Díez, con una programación enfocada en América y los jóvenes. Este enfoque busca fortalecer los vínculos con la escena hispanoamericana y acercar los nuevos lenguajes escénicos a los estudiantes.
Marcela Díez, galardonada con la Orden de las Artes y las Letras de Francia, es una destacada programadora y gestora cultural. Su experiencia incluye la dirección del Festival Internacional Cervantino, uno de los eventos culturales más importantes de Hispanoamérica, y su labor como consultora artística en Italia, Bulgaria y Estados Unidos. En su nueva etapa al frente del festival, Díez buscará consolidar el certamen como un puente entre las tradiciones escénicas europeas e hispanoamericanas.
Proyección internacional y renovación cultural
Con esta nueva dirección, la Comunidad de Madrid reafirma su compromiso con la innovación cultural, consolidando al Festival de Otoño como un evento emblemático y transformador que conecta a Madrid con las principales corrientes artísticas del mundo.