Crítica literaria

Reseña literaria, el mundo Bizantino

A quien le interese el antiguo imperio Bizantino y la religión Ortodoxa, les recomiendo estos dos libros; 

  • La caída de Constantinopla, de Steven Runciman.
  • La Iglesia Ortodoxa, de Timothy Ware.

En el primero podemos leer no sólo acerca de la conquista de la ciudad por Mehmet II en 1453, sino las causas que llevaron a la desaparición de este moribundo imperio.

El otrora poderoso imperio Bizantino de Jutiniano y el conde Belisario, superviviente de las guerras contra los Normandos, los Serbios y Búlgaros en el Oeste, y los persas Sasánidas y posteriormente los Árabes musulmanes en el este; había empezado una acelerada decadencia desde la muerte de Miguel I Comneno en 1180. 

Perdidos hace tiempo los territorios de Italia, del norte de África y de gran parte del Levante Mediterráneo, a finales del siglo XII el imperio se había reducido a Anatolia, la Grecia actual y parte de Bulgaria y de los Balcanes. 

La aparición de los Turcos Otomanos en el medio oriente a mediados del siglo XI iba a suponer el fin del imperio Bizantino, en realidad mucho antes de 1453. En el siglo XIV, expulsado de Anatolia, sin una de sus principales fuentes de hombres y rentas, debilitado por la peste y una serie de guerras civiles, el imperio quedó reducido a Constantinopla, algunas ciudades en la costa del Mar de Mármara y el mar Negro, Tesalonica, algunas islas del Egeo y el Peloponeso. 

Los restos del imperio estaban rodeados por los Otomanos tanto al este en Anatolia como al Oeste en los Balcanes y al norte en Bulgaria. 

El libro, muy ameno, relata todo esto, la búsqueda infructuosa de ayuda en Occidente, el problema del cisma, la caída de la ciudad y el destino de los supervivientes, así como la vida bajo el yugo Otomano. 

Me parece una lectura recomendable para quien tenga interés en la historia del imperio romano de oriente y el impacto del cisma religioso en los acontecimientos de la época. 

El segundo libro es más denso pero muy interesante. En la primera parte repasa la historia de la iglesia Bizantina desde su inicio, el cisma con Roma, la conversión de los pueblos eslavos y el papel de la iglesia Ortodoxa rusa, la supervivencia de la iglesia bajo el poder Otomano y el poder Soviético, y finalmente la situación de la iglesia en el mundo en la segunda mitad del siglo XX. 

En la segunda parte se ocupa de la fe ortodoxa desde un punto de vista teológico, de forma accesible, así como de las diferencias con la fe Católica. Entre estas, mencionar la “filioque”, el conflicto por la primacía del papa, la mayor importancia dada a la transfiguración, entre otras.

En resumen, otra lectura recomendable, si el tema Ortodoxo nos interesa, y que encaja muy bien después de haber leído “La caída de Constantinopla”.