Renfe ha solicitado formalmente a las administraciones públicas que eviten la celebración de eventos multitudinarios en la Puerta del Sol cuando estos impliquen el cierre de la estación de Metro y Cercanías, una de las más transitadas del sistema de transporte madrileño.
La petición se ha formalizado en una carta firmada por la directora de Cercanías Madrid, Sonia Ferrero, dirigida a la Comunidad de Madrid, al Ayuntamiento de la capital y a la Delegación del Gobierno, así como a representantes de la Policía Nacional y Municipal. En ella, Ferrero expone la problemática creciente derivada de los cierres temporales de la estación, que afectan a miles de viajeros a diario.
Renfe señala que el volumen medio de viajeros en Sol es de 73.000 diarios entre semana, 66.000 los sábados y 51.000 los domingos, cifras que se ven seriamente comprometidas por interrupciones programadas como la de este viernes, 13 de junio, cuando la estación permanecerá cerrada entre las 18:30 y las 00:00 horas por la celebración de un concierto con motivo del 40º aniversario de la Real Casa de Correos como sede del Ejecutivo autonómico.
En la misiva, Renfe admite que entiende el cierre de la estación en contextos excepcionales como la Navidad o el Black Friday, pero subraya que estos cierres deberían ser una excepción y no la norma. “El cierre perjudica a muchos usuarios y algunos no responden a eventos extraordinarios”, recalca Ferrero.
Propuesta de soluciones
La operadora ferroviaria plantea dos posibles soluciones ante futuras celebraciones:
-
Buscar ubicaciones alternativas para eventos masivos que no afecten a infraestructuras críticas del transporte público.
-
En caso de no poder trasladar el evento, mantener accesos operativos desde el exterior exclusivamente para los servicios de Cercanías, minimizando así el impacto sobre la movilidad ciudadana.
Renfe recuerda que solo en la franja entre las 18:00 y las 00:00 horas del pasado viernes 6 de junio, más de 26.000 personas utilizaron la estación de Sol, lo que pone de relieve el impacto que puede tener su cierre parcial.
La empresa pública ferroviaria concluye su petición pidiendo que las decisiones de cierre se adopten con un análisis previo del impacto que tienen sobre la movilidad urbana y la eficiencia del transporte público. También reitera que las instalaciones están diseñadas precisamente para facilitar el desplazamiento de los ciudadanos y no deberían verse afectadas por decisiones logísticas que pueden evitarse con una mejor planificación.