El Ayuntamiento de Madrid ha anunciado que reforzará la seguridad en las piscinas municipales de San Fermín y Orcasitas, en el distrito de Usera, con un servicio de información, atención al público y control de accesos para fomentar la convivencia intercultural y garantizar el cumplimiento de la normativa.
El servicio, actualmente en fase de licitación, tendrá un coste de 100.000 euros y se extenderá desde junio de 2025 hasta el final de la temporada estival de 2026.
Objetivo: convivencia y prevención de conflictos
El contrato establece que los trabajadores encargados de este servicio deberán contar con habilidades de comunicación y prevención de conflictos para actuar como refuerzo del personal de seguridad.
La intervención se desarrollará tanto en el interior de las piscinas como en la entrada y las taquillas, con el fin de informar a los usuarios, mejorar la convivencia y prevenir posibles incidentes.
Desde el Ayuntamiento explicaron que esta medida responde a la necesidad de garantizar un ambiente seguro en instalaciones que reciben un alto número de visitantes, donde confluyen diferentes culturas y perfiles de usuarios.
Un servicio externo para garantizar eficacia
El Consistorio ha justificado la contratación de una empresa externa, asegurando que el Ayuntamiento "no dispone de medios específicos propios" para desarrollar esta labor. Por ello, considera "imprescindible" contar con una entidad con experiencia acreditada en este tipo de servicios.
El nuevo plan busca no solo prevenir conflictos, sino también proporcionar información y asistencia a los usuarios, asegurando que el uso de las instalaciones sea seguro y ordenado durante los meses de mayor afluencia.
Con este refuerzo, Madrid apuesta por un modelo de convivencia intercultural, en el que el disfrute de los espacios públicos se desarrolle en un entorno seguro y respetuoso para todos los ciudadanos.
