La Comunidad de Madrid ha renovado el convenio con el Colegio de Registradores de la Propiedad y Mercantiles para continuar prestando servicios de gestión, información y liquidación de impuestos autonómicos como el de Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentados, así como el de Sucesiones y Donaciones. La firma del acuerdo se ha producido este miércoles en la oficina liquidadora de Majadahonda, con la presencia de la consejera de Economía, Hacienda y Empleo, Rocío Albert, y la decana en Madrid del Colegio de Registradores, Belén Merino.
Este convenio, vigente desde 1996 pero renovado bajo un modelo más moderno desde 2021, permite que 24 oficinas distribuidas por toda la región actúen como puntos de atención para los contribuyentes, ofreciendo información tributaria, asistencia técnica en la elaboración de autoliquidaciones y gestión de pagos.
Según los datos ofrecidos por el Ejecutivo autonómico, en 2024 alrededor de 38.000 madrileños recurrieron a estos centros, desde los que se tramitaron más de 126.000 autoliquidaciones. El objetivo es acercar los servicios tributarios a la ciudadanía con atención personalizada y de proximidad, reduciendo trámites y tiempos de espera.
Durante su visita a las instalaciones, la consejera Rocío Albert destacó la importancia de este modelo: “Los resultados avalan una fórmula eficaz que garantiza el acceso fácil y directo a los trámites fiscales, apoyado por casi un centenar de profesionales que prestan servicio con calidad y agilidad”. También subrayó que este servicio “fortalece la colaboración institucional y mejora la experiencia del contribuyente”.
Gracias a este convenio, los contribuyentes pueden presentar declaraciones, resolver dudas fiscales y pagar los tributos de manera sencilla y asistida, utilizando los mismos sistemas digitales de la Administración regional, lo que garantiza la homogeneidad, seguridad y eficiencia del procedimiento.
La renovación del convenio reafirma la apuesta de la Comunidad de Madrid por acercar la administración tributaria al ciudadano, mediante la colaboración con entidades especializadas como el Colegio de Registradores, y en línea con su compromiso por modernizar y facilitar la gestión fiscal de los impuestos sobre los que tiene competencia.