De esta forma, tras seis días de conflicto laboral, la ciudad comenzará a recuperar la normalidad en sus calles en las próximas horas.
La votación favorable de la plantilla ha llegado apenas unas horas antes de que expirase el plazo impuesto por el Ayuntamiento de Madrid, que había advertido que, en caso de no alcanzarse un acuerdo, contrataría empresas externas para garantizar la recogida de residuos a partir de la madrugada del lunes.
El delegado de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad, Borja Carabante, recordó que el Consistorio recurriría a un contrato de emergencia para suplir el servicio y que dicho coste sería repercutido directamente a las concesionarias responsables.
A lo largo de la huelga, el Ayuntamiento ha impuesto a las empresas sanciones económicas progresivas por incumplir los servicios mínimos: 1,6 millones de euros el viernes, 2 millones el sábado, y con la amenaza de seguir sumando 400.000 euros diarios en caso de no resolverse el conflicto.
El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, defendió la necesidad de garantizar la recogida de residuos por cuestiones de higiene y salubridad pública, asegurando que ya se estaban estudiando alternativas inmediatas para intervenir en la limpieza de la ciudad.
Finalmente, tras la ratificación del acuerdo, los servicios de limpieza comenzarán a restablecerse progresivamente, poniendo fin a una huelga que había dejado montones de basura acumulados en numerosas calles de la capital.