El presidente del Consejo Económico y Social (CES), Antón Costas, considera que la reducción de la jornada laboral en España será una realidad “tarde o temprano”, aunque su implantación deberá regirse por principios de gradualidad, flexibilidad y compensación, y no por la imposición inmediata de una norma general.
En una entrevista concedida a Servimedia, Costas explicó que la propuesta de reducir la jornada de 40 a 37,5 horas semanales, impulsada por el Gobierno y debatida durante meses con sindicatos y patronal, necesita “tiempo y diálogo” para concretarse de forma efectiva y equilibrada.
El CES, órgano consultivo del Ejecutivo, aprobó recientemente un informe “prácticamente por unanimidad” que respalda el objetivo de la reducción de jornada como una mejora de derechos laborales y del bienestar personal. Aunque el dictamen no es vinculante, Costas valoró el amplio consenso alcanzado entre representantes sindicales y empresariales, a pesar de que las patronales CEOE y Cepyme no firmaron el texto legal final tras 11 meses de negociación con el Ministerio de Trabajo.
Tres claves para aplicar la medida
Costas detalló que los tres principios fundamentales acordados por los consejeros del CES son:
-
Gradualidad: Imposible aplicar la reducción de forma inmediata. "No se puede publicar un día en el BOE y que entre en vigor al día siguiente", aseguró.
-
Flexibilidad: La medida no puede implantarse igual en todos los sectores económicos. “Hay ramas de actividad muy distintas, con necesidades y ritmos diferentes”.
-
Compensaciones: Habrá sectores donde los costes aumenten a corto plazo, por lo que deben contemplarse ayudas o incentivos para mitigar su impacto.
A juicio del presidente del CES, estos principios “orientarán el debate en el Parlamento”, sin aventurar si será este año o más adelante. Rechazó entrar a valorar posibles bloqueos políticos, aunque reiteró que “el equilibrio entre derechos laborales y sostenibilidad empresarial es posible” si se prioriza el diálogo.
Un modelo de diálogo único en Europa
Antón Costas elogió el modelo de diálogo social español, al que definió como “un activo intangible muy valioso” para el país. “No se ve en otro lugar del mundo. Ha sido una de las claves del buen funcionamiento de la economía española en los últimos años”, sostuvo.
En su doble rol como presidente del CES y miembro del Consejo Estatal de la Productividad, Costas defendió que la mejora de la productividad en España pasa por apostar por la formación dual y reforzar los consensos sociales. Según dijo, esos elementos son decisivos para avanzar hacia empleos de mayor calidad, competitividad y cohesión social.
La rebaja de jornada ha sido una de las promesas clave del Gobierno en esta legislatura, liderada por el Ministerio de Trabajo. Aunque las negociaciones con los agentes sociales no lograron el acuerdo total, el Ejecutivo prevé elevar una propuesta legislativa en las próximas semanas.
Mientras tanto, el CES marca una hoja de ruta clara: avanzar paso a paso, con sentido común, y sin perder de vista ni los derechos laborales ni la viabilidad empresarial.