En cualquier momento, antes de que termine Enero 2.025, Maduro va a mostrar al mundo, los resultados de las listas electorales que le llevaron al triunfo y repetición presidencial en Venezuela.
A todos aquellos que dudaron de su hoy acreditado triunfo, perderán la razón. Para ello, se creará un frente común movido por Zapatero, Garzón, Monedero, Iglesias, Sánchez, Montero, Albares, y muchísimos más de los que forman el Foro de Sao Paulo, para que la UE termine mirando para otro lado y EEUU, también.
El pobre Edmundo González y María Corina Machado, quedarán relegados a la impotencia del recuerdo comparativo pensando en los anteriores que tuvieron que huir al exilio, viendo cómo Maduro se mantiene en el poder más criminal de latinoamérica, mientras el tirano vuelve a establecer lazos de credibilidad internacional, después de que especialmente el gobierno sanchista haya avanzado lo necesario para convencer veladamente en la UE a todos o algunos mandatarios en pro de que este asunto vaya quedando diluido de los temas de interés.
Actualmente, una serie de personas entre las que se encuentran quienes todos sabemos, trabajan confeccionando el falsario documento donde con firmas falseadas de los Presidentes, vocales e interventores de Mesa, se constatarán las actas de cada barrio, pueblo y ciudad, con arreglo a los inequívocos resultados, certificados bajo el siguiente detalle:
• Número de electores que haya en la Mesa según las listas del censo electoral y las certificaciones censales aportadas.
• Número de electores que han votado.
• Número de Interventores que han votado no figurando en las listas de la Mesa.
• Número de papeletas nulas.
• Número de papeletas en blanco.
• Número de votos obtenidos por cada candidatura.
Para mayor credibilidad del dolo, se mostrarán las reclamaciones y protestas formuladas por los representantes de las listas, miembros de las candidaturas, sus apoderados e interventores y por los electores sobre la votación y el escrutinio, así como las resoluciones motivadas de la Mesa sobre ellas, con los votos particulares.
Ni que decir tiene, que la derrota de Maduro, no solo es que NO estaría bien vista por los mandatarios sanchistas, ni de los países de Bolivia, Nicaragua, Cuba, México, Colombia, Honduras, China, Irán y Rusia; sino que podría interpretarse como un fracaso de su política de izquierda radical, abriendo el camino de la decepción para un electorado doblegado, y una oposición que en España ha visto durante el gobierno de Sánchez, como se ha defendido a Maduro, negando toda clase de atentados, detenciones, miseria, recesión, delincuencia, negocio narco y encarcelaciones, a quienes denunciaban o mostraban beligerancia con el régimen bolivariano del criminal dictador.
Maduro, no puede exiliarse ni reconocer la derrota, porque al igual que Pedro Sánchez, Begoña Gómez, Zapatero, Iglesias, las Montero, Alvaro García Ortiz y muchos de los qué hoy configuran la autarquía, incluido el "mal huele" de Conde Corrompido, correrían el riesgo de ser llamados por los tribunales si perdiesen unas elecciones.
Maduro, no puede abandonar Venezuela bajo ningún razonamiento de exilió, porque el miedo a un atentado y la persecución de los tribunales son causas suficientes como para mantenerse en el fraude del engaño al precio que sea, en un país que le protege, le enriquece y le permite dormir tranquilo apresando y haciendo desaparecer opositores.
Maduro, con el apoyo y colaboración de nuestro clandestino errante, conocido como Joker, sentado a la derecha de Sánchez, y la reconstrucción de las falsas actas electorales, resistirá sobrado de razones, mientras María Corina abandonada por la esperanza y la ilusión, habrá de plantearse el exilió, al tiempo que Edmundo González Urrutia, consigue una pensión de supervivencia en España.., y el pueblo bolivariano se mantiene en la senda fidel-izada del sufrimiento de ver como unos cuantos, apoyados por la masa servil y descerebrada, consolidan un país de delincuentes/oportunistas atrapados entre el infierno de la miseria y el sueño de volver a ser felices antes de morir.
Entre los exiliados del criminal gobierno venezolano, están:
Antonio Ledezma, exalcalde de Caracas y líder opositor que consiguió escapar de Venezuela, tras una travesía de peligrosísima pasando por más de docenas de controles policiales del gobierno, hasta ser recibido en España por el entonces presidente del gobierno, Mariano Rajoy.
Leopoldo López, sentenciado por Maduro a 14 años de cárcel por liderar marchas pacíficas de oposición, tras diversos intentos de arresto, asesinato y secuestro, el cual, gracias a Juan Guaidó llegó a Madrid, donde se encuentra exiliado.
Juan Guaidó; reconocido entonces como presidente interino de Venezuela por más de medio centenar de países, se encuentra exiliado en Miami.
Luisa Ortega; ex Fiscal General del Estado, protagonizó su escape en una lancha que la condujo a la isla de Aruba, de ahí, a Bogotá y finalmente a Madrid.
En España también reside el expresidente de la Asamblea Nacional Julio Borges, que inicialmente se había refugiado en Colombia. De igual forma novelesca, el general Miguel Rodríguez Torres también fue acogido por España en enero de 2023 tras su puesta en libertad . El militar fue uno de los funcionarios más poderosos del país, exministro del Interior y de Justicia de Maduro, preso desde 2018 acusado de conspiración.
La ONG Foro Penal calcula que hay cerca de 2.500 personas detenidas en Venezuela por razones políticas y la oficina de la ONU para los Derechos Humanos ha denunciado que las elecciones presidenciales del 28 de julio han derivado en un "clima de miedo" instaurado por el Gobierno de Maduro.
Por consiguiente, que nadie albergue esperanza alguna creyendo que Venezuela y España podrán liberarse de la imparable dictadura, ya que en ello va implícita la seguridad y buena vida de Maduro y Pedro Sánchez junto con todo el séquito de personajes que han hecho posible el andamiaje que sustenta a todos ellos.