En febrero de 1993 se celebró en Mollina, Málaga, España, el “Foro joven: literatura y compromiso” al que se convocaron un grupo de jóvenes autores iberoamericanos conjuntamente con los escritores consagrados más trascendentes de la literatura universal en ese momento, incluyendo varios premios Nobel.
Ese encuentro fue organizado por el Ministerio de Asuntos Sociales de España y el Centro Eurolatinoamericano de la Juventud (CEULAJ) con el propósito de analizar los nuevos desafíos y las nuevas respuestas sobre el quehacer literario en esa época.
De una manera muy rigurosa fuimos escogidos los jóvenes escritores de cada uno de los países de Iberoamérica, ya que entre los requisitos el autor tenía que haber publicado por lo menos dos obras, las cuales fueron analizadas por un jurado que iba averiguando y certificando la trayectoria de los noveles narradores y poetas.
En el caso de República Dominicana se presentaron cuatro jóvenes y tuve el privilegio de ser el escogido como representante de nuestro país a esa histórica cita literaria, en la cual estuvieron presentes los consagrados literatos: Augusto Roa Bastos, Mario Benedetti, Ana María Matute, Juan Goytisolo, Wole Soyinka, José Saramago, Tariq Ali, Abel Pose, Edward Al Kharrat, Lasse Söderberg, Zelia Gattai y Jorge Amado.
Ese experimento social basado en la convivencia entre los escritores consagrados y los jóvenes escritores iberoamericanos, observaba cómo se integraban unos y otros y cuál sería la trayectoria futura de cada uno de los jóvenes escritores que compartimos con las más grandes figuras literarias contemporáneas.
Entre esos entonces noveles escritores que asistimos a Mollina, hoy encontramos importantes escritores con una destacada obra, entre los cuales están:
La española Care Santos, una de las más importantes novelistas españolas contemporáneas. Premio Nadal 2017; el argentino Guillermo Martínez, también Premio Nadal de Novela 2019; la chilena Andrea Maturana, una exquisita cuentista; la cuentista ecuatoriana Gabriela Alemán y la andaluza Ángeles Escudero Bermúdez
Asimismo, el novelista argentino Carlos O. Antognazzi; el venezolano Álvaro Pérez Capiello; el colombiano Antonio Silvera Arenas y el dominicano.
A este grupo de jóvenes que ya tenemos un catálogo importante de libros en la literatura mundial, incluyendo prestigiosos novelistas, cuentistas, ensayistas e historiadores, le denominamos la Generación de Mollina: con una representación de toda Iberoamérica, una producción in crescendo que parte de la última década del pasado siglo y se manifiesta en su máxima expresión cualitativa y cuantitativa en lo que va del siglo XXI.
Aquella fue una experiencia única que todos recordaremos con nostalgia, admiración y sobre todo agradecimiento a las autoridades españolas que tuvieron el acierto de hacer por única vez en la historia un evento de esta magnitud y ofrecernos a tantos jóvenes la gran oportunidad de convertir utopías y sueños en realidades fidedignas y palpables teniendo frente a nosotros a tantas glorias literarias.
