En esta conversación con El Diario de Madrid, Patricia Ferrero explica el significado de celebrar por segundo año consecutivo una jornada que moviliza a estudiantes, profesionales sanitarios y hospitales de la Comunidad de Madrid en favor de la donación de médula ósea. Detalla los objetivos principales de la edición, el impacto del récord alcanzado el año anterior, la importancia de incorporar más donantes jóvenes y desmonta los mitos que aún generan dudas. Además, destaca el enorme valor formativo y humano que esta experiencia supone para los futuros profesionales de la salud y la necesidad de seguir sensibilizando a la población sobre un proceso sencillo, seguro y potencialmente salvador.
¿Qué significado tiene para UAX celebrar la II Jornada de Macrodonación de Médula Ósea y qué objetivos principales se persiguen este año?
Para UAX, celebrar la segunda edición de esta jornada supone reafirmar nuestro compromiso con la ciudadanía y con la salud pública. Esta iniciativa refleja, además, la esencia de nuestro exclusivo modelo formativo #UAXmakers, en el que los estudiantes adquieren competencias y se enfrentan a situaciones reales a través de proyectos que, además, cuentan con un alto impacto social. Los objetivos para esta nueva edición no son otros que formar futuros profesionales capaces de aplicar el conocimiento mediante metodologías innovadoras; seguir sensibilizando a la población sobre la importancia de la donación; incrementar el número de personas registradas como donantes; y consolidar esta jornada como una acción docente, sanitaria y comunitaria de referencia.
El año pasado se alcanzó un récord histórico con 188 nuevos donantes en una universidad. ¿Qué supuso ese logro para la comunidad académica y sanitaria?
El récord del pasado año supuso una enorme satisfacción para toda la comunidad universitaria y sanitaria. La implicación fue máxima por la parte del Equipo Médula de la Comunidad de Madrid y de los estudiantes y docentes de UAX que formamos parte del proyecto. De esta manera pudimos comprobar el potencial transformador que tiene una comunidad académica cuando se moviliza en torno a una causa común y logramos visibilizar el papel crucial de la Enfermería en las estrategias de promoción de la salud.
Este año la jornada se amplía a tres hospitales —Rey Juan Carlos, Infanta Elena y Quirón Pozuelo—. ¿Cómo surge esta colaboración y qué aporta realizarlo de forma simultánea en varios centros?
La colaboración es frutio de una relación estable y de confianza entre UAX y estos destacados centros sanitarios, que comparten nuestra visión de impulsar proyectos que beneficien directamente a la sociedad. Celebrar la jornada de forma simultánea permite ampliar el alcance, facilitar el acceso a más ciudadanos y crear un impacto coordinado mucho mayor, reforzando así la idea de que la donación es un compromiso de todos.
Para quien todavía lo desconoce, ¿qué implica convertirse en donante de médula ósea y por qué es un proceso sencillo pero tan determinante para salvar vidas?
Ser donante implica registrarse mediante una simple extracción de sangre. Solo en caso de compatibilidad con un paciente se realiza la donación, que en la mayoría de los casos es similar a una donación de sangre periférica. Es un proceso seguro, regulado y muy poco invasivo, pero puede convertirse en la única oportunidad de vida para personas con enfermedades hematológicas graves.
¿Cuál es el papel del personal sanitario y de los estudiantes de Enfermería durante la jornada? ¿Qué valor tiene para los estudiantes participar en una iniciativa así?
El personal sanitario garantiza la seguridad del procedimiento, informa, acompaña y registra a los nuevos donantes. Los estudiantes, por su parte, asumen un rol activo en la sensibilización, el acogimiento de los participantes, la realización de las extracciones y el apoyo logístico. A nivel formativo es una experiencia excepcional, porque les permite integrar conocimientos científicos, habilidades comunicativas y trabajo en equipo. También quiero destacar un aspecto muy importante y es que a nivel humano les ayuda de manera muy destacada a comprender su futura profesión.
España cuenta con medio millón de donantes, pero aún se necesita ampliar la base, especialmente de donantes jóvenes. ¿Por qué este perfil es tan importante?
Los donantes jóvenes, especialmente entre 18 y 35 años, ofrecen mayor probabilidad de compatibilidad, mejores resultados clínicos y una mayor disponibilidad a largo plazo. Por ello, los programas internacionales priorizan este perfil. El hecho de que aumentemos este grupo hace que se incremente de forma significativa las oportunidades de encontrar un donante compatible para pacientes que hoy no lo tienen.
¿Qué enfermedades se pueden tratar con un trasplante de médula ósea y en qué medida mejora el pronóstico?
Los trasplantes son esenciales para tratar leucemias, linfomas, mielodisplasias, aplasias medulares y otras patologías hematológicas graves. En muchos casos, la donación es la única opción terapéutica con potencial curativo. Un trasplante compatible puede suponer no solo una mejoría clínica sustancial, sino la posibilidad real de supervivencia.
¿Cuáles son los principales mitos o miedos sobre la donación y cómo se pueden desmentir?
Persisten ideas erróneas como que se dona “la médula espinal” o que es un procedimiento extremadamente doloroso. En realidad, la donación no afecta a la médula espinal y la mayoría se realiza mediante aféresis, un proceso muy similar a donar sangre. Es fundamental explicar este proceso con claridad y basándonos en la evidencia, ya que así ayuda a reducir temores y a que las personas tomen decisiones informadas.
¿Cómo espera que esta jornada contribuya a la sensibilización social?
Desde UAX estamos convencidos que esta jornada va a ser un altavoz de gran sensibilización social. Es importante que quienes participen comprendan el impacto real de un gesto tan sencillo y se conviertan en agentes de difusión. Cada nuevo donante no solo aumenta las posibilidades de salvar una vida, sino que también genera conciencia colectiva sobre la importancia de formar parte del registro.
¿Qué mensaje le gustaría trasladar a quienes aún dudan sobre hacerse donantes?
Los animaría a dar el paso recordándoles que detrás de cada donación hay una historia que puede cambiar por completo. Registrarse es fácil, no supone riesgo y solo se activa cuando un paciente lo necesita. A veces, un gesto que para nosotros es pequeño puede convertirse en la única posibilidad de futuro para otra persona.
