La Comunidad de Madrid se ha consolidado como el principal motor del mercado hipotecario español en el mes de mayo, con un incremento del 71,2% en la firma de hipotecas sobre viviendas respecto al mismo mes del año anterior. Este fuerte crecimiento, muy por encima del 54,4% de media nacional, evidencia la intensa actividad del sector inmobiliario en la región, que sigue liderando el dinamismo del crédito hipotecario en España.
Según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), en mayo se constituyeron 6.209 hipotecas sobre viviendas en la región, un volumen que ha ido en aumento mes tras mes. El capital prestado ascendió a 1.448,35 millones de euros, un 89,64% más que en mayo de 2024, lo que supone uno de los mayores repuntes en la serie histórica.
En el conjunto de fincas, Madrid acumuló 7.598 hipotecas formalizadas, de las cuales 7.589 correspondieron a fincas urbanas y solo nueve a fincas rústicas. Entre las urbanas, además de las viviendas, 67 fueron sobre solares y 1.313 sobre otro tipo de inmuebles.
Aumentan las modificaciones y cancelaciones hipotecarias
En paralelo al aumento de nuevas operaciones, también crecieron las modificaciones contractuales, con 2.209 hipotecas sujetas a cambios: 1.975 por novación, 86 por subrogación del acreedor (cambio de entidad) y 148 por subrogación del deudor (cambio de titular). Asimismo, se cancelaron 8.147 préstamos sobre fincas, 6.367 de ellos relacionados con viviendas.
A nivel nacional, el importe medio de las hipotecas constituidas fue de 158.153 euros, con un crecimiento interanual del 12,7%. Del total, el 69,9% se firmaron a tipo fijo y el 30,1% a tipo variable, lo que indica una clara preferencia por la estabilidad en los pagos ante un entorno todavía incierto.
Un contexto financiero más favorable
Los expertos señalan que el aumento de las hipotecas responde a una combinación de factores financieros y sociales. La bajada del tipo de interés medio —que en mayo se situó en el 2,91%, el cuarto mes consecutivo por debajo del 3%—, ha impulsado la demanda, especialmente en hogares que anteriormente tenían más dificultades de acceso al crédito.
Según el Banco de España, la edad media de los nuevos hipotecados ha descendido, y los préstamos se están concediendo en zonas con menor renta media. A su vez, la carga financiera de los hogares ha caído al 2,4% de su renta disponible, con una previsión de descenso hasta el 2,1% en 2026.
El informe también destaca que el peso de las operaciones financiadas con hipoteca ha vuelto a superar el 53% en abril —la cifra más alta desde agosto de 2022—, mientras las compras al contado pierden fuerza, en parte por el encarecimiento de la vivienda y la recuperación de la demanda embalsada, especialmente entre los menores de 44 años.
La banca compite por clientes solventes
Diversos analistas señalan una "guerra hipotecaria" entre entidades financieras, que han flexibilizado condiciones para atraer a compradores solventes. El interés por financiar operaciones responde al deseo de vincular clientes a largo plazo, mientras la banca intenta contener el riesgo en un mercado inmobiliario en ascenso, donde los precios de la vivienda crecen en torno al 10% anual.
A pesar de ello, la calidad crediticia ha mejorado, con una reducción del volumen de préstamos dudosos y en vigilancia especial, y una riqueza familiar creciente gracias a la revalorización de activos, especialmente la vivienda.
Madrid, con su impulso hipotecario, sigue marcando la pauta del sector en España, y todo apunta a que la tendencia al alza continuará en los próximos meses si se mantiene el entorno de tipos bajos y la confianza de los consumidores.