Hace más de treinta y cinco años en La Garrotxa, Girona, en una masía del siglo X rodeada de naturaleza, nació Alquimia. Una Empresa dedicada a la cosmética natural y a la aromaterapia. creada por Idili Lizcano, un alquimista experto del que tras su despedida hace ya tres años, su hija Drolma ha tomado el testigo convirtiéndose actualmente en la directora general de la misma.
¿Fue fácil con sus antecedentes familiares continuar la labor de su padre?
La verdad es que, desde muy pequeña, tuve muy clara mi vocación de seguir con esta gran empresa cuando fuese mayor. De hecho, con nueve años ya creaba mis perfumes a base de Aceites Esenciales, a los que ponía nombre y precio. ¡Empresaria nata!
Mas tarde, a su lado entendí que belleza es igual a salud y bienestar, que cuando uno se siente bien por dentro y lleva una vida saludable, está en equilibrio a nivel de cuerpo, mente y alma, e irradia su belleza desde el interior hacia el exterior.
¡Todo ser humano es bello! y en Alquimia nos preocupamos por cuidar, resaltar y multiplicar esa belleza desde la investigación y los tratamientos y producto más punteros en los que siempre va implícita la meditación de mi padre “Mi trabajo es una ofrenda al mundo, una oración. Este es el secreto del noble arte de la alquimia”
¿Cuál es la última novedad en la que trabajan?
Pues una muy basada también en la última creación de Idili, en sus perfumes.
Mi padre era un hombre visionario, con una creatividad desbordante. Siempre explicaba que sus ideas venían de una especie de “sexto sentido”, o intuición. A veces soñaba con las fórmulas de los productos. Y les tenía un especial cariño a las fragancias debido quizás a su crianza en París. Le encantaba entrar en las perfumerías de la Plaza Vendôme a oler esencias, y pensó que alguna vez las haría aun mejores.
Lo ha conseguido, en efecto son únicas. Unos elixires olfativos apasionantes y transgresores.
Y en que se inspiró para llevarlos a cabo?
En la mujer y también en la energía de la luna.
Idili desde los inicios de Alqvimia tuvo muy claro que su misión en la vida era ayudar a las mujeres. En su transcurso ha creado productos maravillosos como el Sensuality Body Nectar Woman y el Aceite Bust Firming.
En este caso, pensó en la ciclicidad femenina, en todas esas energías que conviven dentro de cada una de ellas y que él podía apreciar desde el exterior
Quiso colaborar en aflorar tales energías apoyándose en la magia de los Aceites Esenciales y de este modo nacieron los perfumes de las Diosas.
¿Cuántos son?
Cuatro perfumes, cuatro declinaciones, cuatro fases lunares y cuatro estilos de mujer. Son perfumes funcionales, que se pueden utilizar como apoyo a nivel emocional, cuando se necesitan. Conectan con la esencia interior, y despiertan sensaciones y emociones únicas.
Cada uno de ellos tiene pues una esencia concreta que define su aroma y también a un tipo de mujer.
Suena a algo misterioso y muy seductor ¿Cuáles son estas esencias?
Cada una tiene una sinergia única de Aceites Esenciales que ayudan a conectar con cada arquetipo de Diosa. En Hécate encontramos el Neroli, la Vainilla y el Sándalo que conectan con la calma, la sabiduría interior y la intuición. En Athena (Atenea) destacan el Geranio, el Palo de Rosa y el Patchouli, provocando fuerza, alegría, vitalidad y determinación, característica de la Diosa de la estrategia, sabiduría y justicia. Aphrodite (Afrodita) es la diosa de la sensualidad, y por eso el perfume se basa en el Jazmín, el Ylang Ylang y el sándalo, esencias afrodisíacas. Finalmente, la Rosa Búlgara, el Nardo y el Nerolí son los Aceites Esenciales que predominan en el perfume de Hera, el arquetipo de la energía maternal que es bondadosa y generosa, y a su vez, invita a esa reflexión interior y a un bienestar pleno.
Estos perfumes se desmarcan de los habituales, ¿qué diferencias hay entre ellos y los otros más convencionales?
Creo que tres grandes diferencias. La primera es que son Esprit de Parfum, o sea, su cantidad de concentración de Aceites Esenciales puros, es hasta diez veces superior a la de cualquier otro perfume. Su efecto es más potente en aroma y en persistencia.
La segunda es que se trata de perfumes 100% puros y naturales. Un reclamo importante para quienes valoran su salud. Y por último, y para mí muy importante, es que están pensados para una misma, no para complacer a los demás.
¿Se podría decir pues que los perfumes de Alquimia son empoderadores?
Si porque conectan con nuestro cuerpo y nos ayudan a decidir por nosotras mismas nuestro estado de ánimo. Antiguamente las fragancias se utilizaban para enmascarar posibles malos olores. Ahora el concepto moderno es que son para “oler bien” para los demás.
Y los de Alquimia están pensados para que cada mujer comprenda su máximo potencial, su energía interior, y pueda complacerse mejor a sí misma.