La Casa de Campo de Madrid ha experimentado una drástica disminución de incendios forestales, con una reducción del 85 % en el número de fuegos en comparación con 2001, gracias a los operativos municipales de prevención e intervención puestos en marcha por el Ayuntamiento desde 2004. Si en aquel año crítico se registraron hasta 70 incendios que arrasaron 151.978 m², en 2024 solo se produjeron diez conatos, afectando una superficie total de apenas 1.419 m².
Este martes, la vicealcaldesa y alcaldesa en funciones, Inma Sanz, junto con el delegado de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad, Borja Carabante, ha visitado el cerro de Garabitas, uno de los puntos estratégicos de vigilancia de incendios en la Casa de Campo, para supervisar el desarrollo del operativo de este año. Los acompañaban también los concejales José Antonio Martínez Páramo y Borja Fanjul.
Hasta la fecha, el dispositivo 2025 ha registrado únicamente dos conatos de incendio, ambos de escasa magnitud, relacionados con descuidos o fuegos intencionados. En contraste, en el Área Forestal de Tres Cantos, cerrada al público y gestionada también por el Ayuntamiento, no se ha producido ningún incendio desde 2006, lo que demuestra la eficacia de los controles en zonas restringidas.
Campaña 2025: refuerzo anticipado y tecnología operativa
El actual operativo comenzó el pasado 21 de abril, adelantándose al periodo tradicional de activación. Está compuesto por 53 efectivos distribuidos en tres retenes de pronto ataque, encargados tanto de la vigilancia de 1.900 hectáreas de terreno forestal —1.700 en la Casa de Campo y el resto en Tres Cantos— como de los trabajos de prevención y aviso a los servicios de emergencia en caso necesario.
El sistema de vigilancia cuenta con tres torres —dos en Casa de Campo y una en Tres Cantos— y está equipado con cinco autobombas ligeras de 450 litros, dos autobombas semipesadas de 3.500 litros, así como herramientas manuales especializadas. El Cuerpo de Bomberos de Madrid colabora con una autobomba forestal pesada con 2.900 litros de agua y 100 litros de espumógeno, disponible como refuerzo ante cualquier emergencia.
La coordinación del operativo se lleva a cabo mediante telefonía móvil y emisoras portátiles, con contacto diario tanto con la central de bomberos como con el servicio de emergencias 112, garantizando una capacidad de respuesta ágil y eficaz.
Prevención: clave del éxito
Las actuaciones preventivas han sido fundamentales para alcanzar estos resultados. En la campaña anterior se ejecutaron 128 kilómetros de mantenimiento de cortafuegos, desbroces en 1.400 hectáreas, podas de coníferas y árboles de gran porte, así como tratamientos selvícolas específicos. Estas intervenciones minimizan el riesgo de propagación del fuego y mejoran la salud del ecosistema forestal.
Una iniciativa destacada ha sido el pastoreo controlado de un rebaño de 450 ovejas en la Casa de Campo durante la primavera. Este método ecológico ha permitido reducir la carga vegetal inflamable, regenerar suelos mediante estiércol, fomentar la biodiversidad y ofrecer un recurso educativo y turístico valioso.
El Ayuntamiento de Madrid agradece la colaboración ciudadana, instando a los vecinos a alertar al 112 ante cualquier indicio de fuego, lo que permite una respuesta inmediata y efectiva.
Con estas medidas, Madrid refuerza su compromiso con la protección del medioambiente urbano y la seguridad de sus espacios verdes, consolidando la Casa de Campo como un modelo de gestión forestal preventiva y sostenible.