La Comunidad de Madrid activará mañana lunes una convocatoria de empleo público para cubrir 45 plazas de oficiales de mantenimiento del Metro de Madrid, tal como recoge la Oferta Pública de Empleo (OPE) que se publicará en el Boletín Oficial de la Comunidad de Madrid (BOCM).
Esta medida responde al objetivo de reforzar la plantilla técnica del suburbano, cuya categoría profesional representa actualmente el 15% de los 7.300 empleados de Metro.
Distribución de plazas por especialidad
La convocatoria contempla la siguiente distribución de vacantes:
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16 plazas en electricidad
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4 en Electrónica y Comunicaciones
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21 en Material Rodante y Mecatrónica
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4 en Obra Civil
Requisitos y fases del proceso selectivo
Podrán participar quienes estén inscritos como demandantes de empleo en las oficinas públicas de la Comunidad de Madrid, bajo los códigos ocupacionales correspondientes y que cumplan con los requisitos específicos de formación o experiencia indicados en las bases.
El proceso de selección se desarrollará en varias fases:
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Preselección inicial por el Servicio Regional de Empleo a partir del 1 de julio de 2025.
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Prueba objetiva de aptitud prevista para septiembre.
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Reconocimiento médico y posterior curso formativo previo a la incorporación.
Está previsto que las primeras contrataciones se formalicen en el primer trimestre de 2026, y el 7% de las plazas estará reservado para personas con discapacidad en cada subproceso.
Creación de una bolsa de reserva
Además de las 45 plazas ofertadas, se constituirá una bolsa de reserva con hasta 405 candidatos, seleccionados en función de los mejores resultados en las pruebas objetivas. Esta medida busca cubrir futuras necesidades o bajas.
Cumplimiento del convenio colectivo
Este proceso forma parte del compromiso adquirido en el Convenio Colectivo firmado el pasado 31 de marzo de 2025, que establecía la necesidad de reforzar el cuerpo de mantenimiento del suburbano mediante nuevas incorporaciones.
Con esta iniciativa, el Gobierno regional reafirma su apuesta por mejorar el servicio de Metro, asegurar la estabilidad laboral (casi el 100% de la plantilla tiene contrato indefinido), y garantizar el buen funcionamiento de una red clave en la movilidad de millones de ciudadanos.