Parafraseando a James Jones y la experiencia traumática de Guadalcanal, en estos días desde la asunción por segundo mandato del Presidente Donald Trump irrumpe en la Geopolítica de forma brutal e impredecible, por un lado la intromisión en el ámbito de las decisiones internas, la incertidumbre de los inmigrantes latinos, el aumento arancelario sobre exportaciones e importaciones, hasta el regreso a los sorbetes plásticos en lugar de los de papel biodegradables. Por otra parte la intención de intervenir en la Franja de Gaza activamente, la imposición de dar por terminado los acuerdos de paz por el incumplimiento de Hamas, y la mirada de reojo de los conflictos, a esta altura ya fuera de foco principal de Ucrania y Rusia. Todo está en un momento de espera e incertidumbre. Vale recordar que la incertidumbre es prima hermana de la desconfianza y claro está del miedo.
La reacción inmediata de los mercados no se hizo esperar, el aumento en un solo día del 6% en el precio del acero coloca la mirada del mundo económico en un ojo expectante, y especulante. El dinero es hoy quien dirige claramente los designios de Estados Unidos, pero más que el dinero como fuente de riqueza, es el dinero como fuente de poder, y en ese ámbito es donde se dirime todo. La puja del poder mundial está en juego, los ejes que lo ejecutan cada vez son más marcados, parece por el momento que Trump ha venido a marcar, sin medias tintas una postura marcada a diferenciarse y colocar al mundo en un extremo totalmente opuesto a su predecesor.
El poder se sigue moviendo entre amenazas, y los que se llaman poderosos siguen pensando que dominan todo en este mundo, todavía no han aprendido de la propia finitud, y de aquellas cuestiones que escapan a los dominios humanos, así lo quieren señalar los científicos que atentamente vigilan al Asteroide 2024 YR4, no vaya a ser queridos lectores que mientras perdemos el tiempo en discusiones estériles nos quedemos, como dice Luis Piedrahita con “nada por aquí, ni nada por allí”, por las dudas siempre llevar ropa interior limpia para estar preparados decía mi Madre.
