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Fernando Méndez, con la tinta escrita en la sangre

FERNANDO MÉNDEZ
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Con la tinta escrita en la sangre, el ourensano Fernando Méndez muestra al público toda una sucesión de ensayos y novelas que lo avalan, cuya génesis literaria nace en la denuncia de los envenenaientos del metílico, dilatándose en el tiempo en una narrativa de actualidad. Vital y activo, Fernando Méndez, se empeña a diario en escribir y emocionar, trasladando ahora aquel ensayo a novela:  La vida mientras luchamos.

Procedente del verbo emerger, por definición, el adjetivo emergente determina a aquel o aquello que emerge, que nace, sale y tiene principio de otra cosa, y por extensión emergente es lo mismo que decir flotante, ascendiente, naciente o saliente.

Para el caso que nos ocupa, emergente es aquel que comienza a descollar, sin importar su edad y ocupación, aunque nuestro interés se centra en las artes y las letras, queremos vernos las caras con aquellos que sobresalen o comienzan a hacerlo, a destacar, despuntar, resaltar o distinguirse, para conocimiento general del respetable, y qué mejor que haciéndonos partícipes del personaje.

El personaje invitado:

Fernando Rodríguez Méndez

Seudónimo, alias, nombre artístico o de guerra

Fernando Méndez

Nombre, lugar y fecha de nacimiento

Buenos Aires, 11 de marzo de 1964.

¿Por qué escritor?

Por el reto que supone enfrentarte a la vida desde otra perspectiva. Como dice Paul Éluard: “Hay otros mundos, pero están en este”. Se trata de descubrirlos e intentar descifrarlos.

¿Cuándo supiste que lo tuyo era esto?

Creo que eso no se sabe nunca. Mejor así, porque el día que lo descubras dejas de escribir.

Un norte o principio inamovible

Ninguno. Lo bueno de la experiencia vital es que aprendes a relativizarlo todo. Lo que no se mueve no evoluciona.

¿Cuáles son tus influencias?

Las lecturas de juventud marcan mucho. Verne, quizás, por las ansias de libertad. Después el misterio a lo desconocido, con Stephen King. Más adelante Cervantes, Rulfo, Hesse, Faulkner, Eco…

¿Y tu referente?

Siempre me sorprende Juan José Millás.

¿Cuál es, a tu juicio, la mejor novela?

Hay muchas, pero El orden alfabético está entre mis preferidas.

¿Y tu mejor obra?

La vida mientras luchamos.

¿A quién consideras el mejor escritor?

Prefiero no poner medallas de oro. Para mí no se trata de una competición. Cuando alguien dedica su tiempo a escribir y emocionarte merece siempre ganar.

Con quién cenarías, con quién no, y porqué.

Quizás con David Safier, me encantaría que me contase cómo se le ocurrió escribir Maldito karma. Y no cenaría con gente aburrida, sea o no sea del mundo literario. El tiempo vale mucho para perderlo.

¿El hábito hace al monje?

Depende como sea el hábito y como sea el monje.

¿Crees que la cultura en general es independiente?

¿Conoces algo que sea verdaderamente independiente?

¿Y la novela en particular?

Por suerte, la novela vive en un territorio con muchas fisuras para escapar. Menos mal.

Tu última obra

La historia del caso Metílico novelada: “La vida mientras luchamos”. Fue el mayor envenenamiento ocurrido en el mundo. Ahora me acerco al tema abordando la perspectiva social y política.

Tu próximo proyecto

Una novela basada en hechos reales. Cuando descubrí el tema me atrapó desde el primer momento. 

Una anécdota divertida

Nunca empiezo a escribir un libro si no tengo el título antes. No es divertida, pero es curiosa.

Por último, si tuvieras una varita mágica, ¿qué harías?

Romperla. La vida ya es mágica.