El Ministerio de Consumo ha emitido una histórica sanción por valor de 150 millones de euros a Ryanair, Volotea, Vueling y EasyJet. Aunque, ha sido la irlandesa la que se ha llevado la mayor parte, sin dar detalles de las cantidades exactas. Esta multa viene motivada por la aplicación de cargos extra a los usuarios, como cobrar por el equipaje de mano o por elegir asiento si se viaja con niños o personas dependientes.
¿Qué dice la sanción?
En junio de 2023, Consumo abrió un expediente para analizar si las prácticas mencionadas, y otras como la obligatoriedad de imprimir el billete, era abusivas, desleales o contravenían la normativa vigente. Ahora, casi un año después, el ministerio se ha pronunciado de manera rotunda entendiendo que las aerolíneas estaban infringiendo la normativa.
La denuncia, que nació en el seno de varias organizaciones de consumidores, pone el foco en cuatro prácticas concretas. La primera se enfoca en el cobro de un suplemento extra a la hora de elegir asientos contiguos cuando el acompañante es un menor o una persona dependiente. En segundo lugar, mencionan la falta de transparencia en la información precontractual sobre el precio final del servicio. Además, el tercer punto, se enfoca en el extra que los viajeros deben pagar si quieren llevar equipaje de mano a bordo. Mientras que, finalmente, también se investigó el hecho de no permitir el pago en metálico en el propio aeropuerto para afrontar el coste extra de estos servicios.
La respuesta de las aerolíneas
Lo cierto es que esta decisión de Consumo no ha gustado a las propias compañías aéreas, que ya preparan un recurso de casación ante el ministerio. Además, también podrían acudir a la Audiencia Nacional si el recurso no tiene el resultado esperado, ya que la sanción del ministerio no es en firme.
Además, desde la Asociación de Líneas Aéreas (ALA), se han defendido alegando que “las multas son desproporcionadas por la cantidad y por la prohibición de esas prácticas a futuro”, según el presidente de ALA, Javier Gándara. “Hoy en día hay 50 millones de pasajeros que suben al avión sin llevar maleta de cabina” y, con esta decisión “tendrían que empezar a pagar por servicios que no precisan”.
¿Podrás llevar equipaje de mano gratis?
Dejando a un lado esta guerra jurídica que se avecina, es normal que los clientes y usuarios se pregunten sobre cómo les puede afectar esta decisión de Consumo a partir de ahora.
Lo cierto es que, de momento, y hasta que la multa no sea en firme, las aerolíneas mencionadas - Ryanair, Volotea, Vueling y EasyJet – podrán seguir cobrando los suplementos por los que han sido investigadas. Así que, si viajas este verano con alguna de estas compañías, tendrás que pagar un extra por el equipaje de mano y por la selección de asientos.
Por el momento, este primer recurso puede alargarse un mes en su presentación por parte de las compañías y tres meses en recibir la respuesta de Consumo. Después, puede abrirse la vía judicial. Así, por el momento, estas empresas podrán seguir manteniendo estos suplementos.
¿Qué cabe esperar?
Lo cierto es que la Ley de Navegación Aérea podría dar la razón a los consumidores, ya que se establece que cobrar por el equipaje de cabina es ilegal. De hecho, Ryanair ya registró una sentencia judicial en contra y tuvo que indemnizar a una usuaria con 120 euros por cobrarle por llevar una maleta de mano en cabina.
Ahora bien, esta misma normativa también permite que las empresas puedan cobrar un suplemento en caso de que la cabina vaya demasiado cargada. Por tanto, se puede abrir por ahí un resquicio favorable a las aerolíneas.
Por otro lado, en Bruselas se está trabajando en determinar unas medidas comunes para el equipaje de mano y equipararlo en todas las empresas. Aunque, también se abre la posibilidad de que las empresas puedan cobrar un suplemento por el resto de bultos que se lleven, más allá de ese.
Finalmente, según el presidente de ALA, si la resolución termina sancionando a las empresas Low Cost y prohibiendo el uso de estas prácticas, puede repercutir en un aumento en el coste de los billetes de avión, ya que el suplemento iría dentro del precio final que pagan los consumidores.
