La Comunidad de Madrid ha aprobado una inversión de 13,1 millones de euros para prorrogar los contratos de gestión de 21 escuelas infantiles públicas, que ofrecen un total de 3.504 plazas educativas para el curso 2025/26. Esta decisión fue ratificada esta semana por el Consejo de Gobierno regional y afectará a centros ubicados en 16 municipios de la región.
Los contratos se extenderán hasta agosto de 2026, con el objetivo de garantizar la continuidad del servicio educativo para niños de entre 0 y 3 años, una etapa en la que la escolarización es completamente gratuita desde el año 2019 en toda la red pública autonómica. Esta red cuenta actualmente con 396 centros distribuidos por toda la Comunidad de Madrid.
Entre los propósitos de esta iniciativa, el Ejecutivo regional subraya su compromiso con la calidad educativa, así como con la conciliación de la vida familiar y laboral, la igualdad de oportunidades y la libertad de elección de centro por parte de las familias.
Las escuelas beneficiadas por esta prórroga se reparten por numerosos municipios madrileños. Algunas de ellas son El Almendro (Colmenar Viejo), Antón Pirulero (Coslada), Aserrín Aserrán (Las Rozas), Campanilla (Arroyomolinos), El Cocherito Leré (Fuenlabrada), El Corro de la Patata (Alcorcón), Cuentacuentos (Collado Villalba), Don Melitón (Alcalá de Henares), Fábulas y Leyendas (Móstoles) y Jacaranda (Valdemoro). También destacan Nanas de la cebolla y Patas arriba (Rivas-Vaciamadrid), Pandora (Leganés), Pinceladas (Arganda del Rey), Pío pío (Alcobendas), La Tarara (Majadahonda), y La Aldea, Cinco lobitos, Sol solito, Palmas palmitas y Valle de oro, en la ciudad de Madrid.
La selección de las entidades gestoras se realiza a través de un procedimiento público basado en criterios de calidad, como el proyecto docente, la propuesta pedagógica, la atención a alumnado con necesidades especiales, la gestión de personal y la oferta de actividades complementarias.
Esta nueva inversión refuerza el compromiso del Gobierno regional con el fortalecimiento del sistema educativo desde sus primeras etapas, garantizando que la educación infantil siga siendo un recurso accesible, inclusivo y adaptado a las necesidades de las familias madrileñas.
