El Centro de Cultura Contemporánea Condeduque, espacio del Área de Cultura, Turismo y Deporte del Ayuntamiento de Madrid, acogerá los próximos 27 y 28 de febrero Analphabet, la nueva propuesta escénica del dramaturgo y coreógrafo malagueño Alberto Cortés. Se trata de una performance poética que explora el amor, el dolor y la transformación a través de un relato donde lo romántico y lo humano se funden en un encuentro inesperado con lo sobrenatural.
Un fantasma, un amor roto y la poesía como sanación
La historia de Analphabet se sitúa en la playa de Gulpiyuri, donde, tras una acalorada discusión de pareja al atardecer, aparece un fantasma romántico que viene a contar su historia y cantar canciones a los protagonistas.
"Es un ser de leyenda que trae consigo el peso de la poesía y el eco de los amores perdidos", explica Alberto Cortés. Inspirado en la tradición del romanticismo alemán, con referencias a Goethe, Hölderlin y Novalis, Analphabet también bebe de influencias andaluzas y vascas.
El personaje principal, un espíritu atormentado que llega moribundo y herido sobre un caballo, no solo representa la melancolía, sino también una posibilidad de sanación a través de la poesía y la introspección.
Un creador con trayectoria en la escena contemporánea
Nacido en Málaga en 1983, Alberto Cortés es un artista multidisciplinar con una trayectoria consolidada en la dirección escénica, la dramaturgia y la investigación del cuerpo en la escena contemporánea.
En 2008 fundó la compañía Bajotierra, junto a la actriz Alessandra García, y ha impulsado iniciativas como el festival de escena alternativa de Málaga El Quirófano y el ciclo Escena Bruta, además de programas de mediación artística como Territorio Expansivo.
Desde 2012 desarrolla un camino más personal de exploración escénica, utilizando el cuerpo y la poesía como herramientas fundamentales en sus creaciones. Actualmente, con sede en Sevilla, continúa desarrollando sus proyectos y acompañando a otras creadoras en sus procesos creativos.
Con Analphabet, Cortés propone un viaje sensorial y emocional, una obra que combina performance, poesía y narración, desdibujando los límites entre el teatro y la experiencia íntima del espectador.