La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) ha denunciado una grave agresión sufrida por una trabajadora en la residencia de mayores La Paz, situada en la calle Doctor Esquerdo de Madrid, centro dependiente de la Consejería de Familia, Juventud y Asuntos Sociales de la Comunidad de Madrid.
Según ha informado el sindicato, la trabajadora fue atacada por un usuario del centro sin poder reaccionar, un suceso que no constituye un caso aislado, sino que forma parte de una tendencia preocupante derivada de la incorporación en estos centros de personas procedentes de la calle, muchas de ellas con trastornos mentales y adicciones.
CSIF advierte que el personal de las residencias de mayores no está preparado para tratar con este tipo de perfiles, ya que carece de formación específica en intervención psiquiátrica y en gestión de situaciones conflictivas de alto riesgo. Esta falta de preparación, según el sindicato, incrementa el peligro tanto para los trabajadores como para los propios residentes.
“La seguridad de las trabajadoras y la calidad de la atención a los mayores debe ser una prioridad para la administración autonómica. No se puede seguir ignorando este problema”, subraya CSIF Madrid en su comunicado.
Ante esta situación, el sindicato exige a la Comunidad de Madrid que dote al personal de formación y recursos adecuados para atender a usuarios con patologías psiquiátricas y adicciones, y que garantice la integridad del personal en cumplimiento de su responsabilidad en materia de seguridad y salud laboral.
CSIF recuerda que la prevención de riesgos laborales es un derecho fundamental y reclama una acción contundente para proteger tanto a los trabajadores como a las personas mayores residentes.
Escuela de Defensa Personal para empleados públicos
El sindicato también ha anunciado la próxima creación de una Escuela de Defensa Personal para empleados públicos, coordinada por el Área de Formación de la Unión Autonómica de Madrid de CSIF.
El objetivo de esta iniciativa es ofrecer herramientas prácticas para identificar señales de agresión, anticiparse y actuar con seguridad, reforzando la confianza y el autocuidado del personal que trabaja en entornos sensibles.
“Este tipo de agresiones no solo afectan a docentes o sanitarios. Prácticamente todos los sectores de las administraciones públicas se enfrentan a episodios violentos”, señala CSIF Madrid, que considera imprescindible formar y proteger al personal público frente a los riesgos emergentes del entorno laboral actual.