La tragedia golpea de nuevo a Castilla y León. Un hombre de 36 años, que había resultado herido crítico mientras trabajaba con maquinaria para contener el avance de las llamas en el municipio leonés de Nogarejas, ha muerto en la madrugada de este jueves en la Unidad de Quemados del Hospital Universitario Río Hortega de Valladolid.
El voluntario formaba parte del grupo de vecinos que, de forma altruista, se sumó a las tareas de extinción cuando el fuego amenazaba viviendas y fincas de la zona. El martes, dos lenguas de fuego le sorprendieron en plena faena, del mismo modo que a su compañero Abel Ramos, de 35 años, que perdió la vida ese mismo día en circunstancias similares.
En Castilla y León permanecen ingresadas otras dos personas con quemaduras de diversa consideración por estos incendios. El presidente autonómico, Alfonso Fernández Mañueco, expresó esta mañana su pesar y evitó dar más detalles sobre la identidad del fallecido “por respeto a la familia” y para ser “escrupulosos” con la información.
Con esta última víctima, ascienden a tres los fallecidos en la ola de incendios que asola España desde la pasada semana. Además de los dos voluntarios muertos en León, el lunes perdió la vida en Tres Cantos (Madrid) un hombre que intentaba rescatar a los caballos de una hípica afectada por el fuego.
Situación de los incendios
Los focos activos en León, Zamora, Galicia y Extremadura mantienen en alerta a las autoridades y han obligado a desalojar a miles de personas. En total, más de 50.000 hectáreas han ardido en lo que va de verano, según datos provisionales, en un contexto de temperaturas extremas y rachas de viento que dificultan las labores de control.
El secretario de Estado de Medio Ambiente, Hugo Morán, ha defendido la coordinación entre el Estado y las comunidades autónomas, asegurando que España “es uno de los países con mejor capacidad de respuesta técnica” ante grandes incendios. Por su parte, el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, confirmó la llegada a Galicia de dos aviones Canadair enviados por Francia a través del Mecanismo Europeo de Protección Civil, con capacidad para más de 5.500 litros de agua cada uno.
Reacciones
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, calificó de “insoportable” esta nueva pérdida y trasladó su “cariño” a familiares y amigos de la víctima. “No olvidamos a los heridos ni a los vecinos que sufren el dolor del fuego. Todos los medios del Gobierno están a su disposición”, afirmó en sus redes sociales.
Desde la Federación Española de Municipios y Provincias, su presidenta, María José García-Pelayo, elogió el “ejemplo de servicio público” de brigadistas y voluntarios, subrayando que “protegen la vida de los demás y salvaguardan uno de nuestros bienes más preciados: la naturaleza”.
Llamamiento a la prudencia
Las autoridades insisten en que se extremen las precauciones y se respeten las órdenes de evacuación. “Nuestra prioridad es salvar vidas y proteger el medio ambiente. Pedimos a la población que siga las indicaciones de los equipos de seguridad y emergencias”, reiteró Grande-Marlaska.