Se trata de un avance que permitirá a los pacientes acceder a técnicas diagnósticas y terapéuticas sin necesidad de desplazarse al Hospital La Paz, donde hasta el pasado mes de julio eran derivados para someterse a pruebas como los cateterismos.
La nueva unidad comenzó a funcionar este verano y ya en julio acogió el primer cateterismo cardiaco, tutelado por el Servicio de Hemodinámica de La Paz. A partir de ahora, serán los cardiólogos del Infanta Sofía quienes se encarguen directamente de la indicación, tratamiento y seguimiento de estas patologías.
Mayor seguridad y calidad asistencial
Según destacan desde el centro sanitario, este nuevo recurso ofrece múltiples ventajas para los usuarios: un acceso más ágil a los procedimientos más habituales en Hemodinámica, una mayor seguridad y calidad asistencial, así como una mejora en la eficiencia del sistema. Además, la nueva infraestructura impulsa la investigación y la docencia, al facilitar la acreditación para la formación de médicos internos residentes especialistas en cardiología.
El cateterismo es una técnica invasiva que consiste en la introducción de catéteres hasta el corazón para valorar su anatomía y el estado de las arterias coronarias. Su indicación más frecuente se da en pacientes con infarto agudo de miocardio o con descompensación por cardiopatía isquémica, aunque también se utiliza para estudiar la función cardiaca, valvular y las presiones pulmonares.
Innovación en prevención: chalecos desfibriladores
Otra de las novedades recientes en el área de Cardiología del Infanta Sofía ha sido la implantación de chalecos desfibriladores para pacientes con riesgo de muerte súbita. El primero se colocó el mes pasado a un hombre de 46 años diagnosticado con miocardiopatía dilatada, en espera de comprobar la evolución de su función cardiaca con el tratamiento.
Este dispositivo portátil, indicado de manera temporal durante uno a tres meses, actúa como medida preventiva mientras se determina si es necesario implantar un desfibrilador definitivo.
Impulso a la sanidad pública madrileña
Con la incorporación de esta sala de Hemodinámica y la introducción de los chalecos desfibriladores, el Hospital Infanta Sofía refuerza su cartera de servicios y mejora la atención a pacientes cardiacos en la zona norte de la Comunidad de Madrid, evitando desplazamientos y acercando a la ciudadanía recursos de alta complejidad médica.