La nueva Ley de Conciliación, aprobada por Real Decreto-ley 9/2025, amplía el permiso por nacimiento y cuidado del menor y sitúa a España entre los países europeos con licencias parentales más largas. El cambio beneficiará a más de 40.000 familias al año en la Comunidad de Madrid, aunque sindicatos y patronal discrepan sobre su alcance real.
Un cambio legislativo urgente para cumplir con Europa
El 30 de julio de 2025 se publicó en el Boletín Oficial del Estado el Real Decreto-ley 9/2025, aprobado el día anterior en Consejo de Ministros, que modifica el Estatuto de los Trabajadores, el Estatuto Básico del Empleado Público y la Ley General de la Seguridad Social. Su objetivo: completar la transposición de la Directiva (UE) 2019/1158 sobre conciliación de la vida familiar y profesional de progenitores y cuidadores, y evitar sanciones económicas de Bruselas.
La nueva norma amplía desde el 1 de agosto de 2025 el permiso retribuido por nacimiento y cuidado del menor de 16 a 19 semanas para cada progenitor. En el caso de familias monoparentales, el derecho se extiende a 32 semanas. La aplicación será progresiva: a partir del 1 de enero de 2026, las tres semanas adicionales podrán disfrutarse hasta que el menor cumpla ocho años.
Cómo queda el permiso: semanas obligatorias y flexibles
Según el Ministerio de Trabajo y Economía Social, el nuevo esquema queda así:
- 6 semanas obligatorias inmediatamente posteriores al parto, adopción, guarda o acogimiento, de disfrute ininterrumpido y a jornada completa.
- 13 semanas voluntarias (antes eran 10), que pueden disfrutarse de forma continua o interrumpida, a tiempo completo o parcial, hasta que el menor cumpla ocho años.
- En familias monoparentales, la persona progenitora podrá sumar a su permiso las semanas que corresponderían al otro progenitor, alcanzando las 32 semanas retribuidas.

“Esta ampliación sitúa a España a la vanguardia europea en permisos de nacimiento, pero sobre todo responde a un mandato de justicia social: las familias necesitan tiempo para cuidar”, afirmó Yolanda Díaz, vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros.
Impacto en Madrid: más de 40.000 familias beneficiadas cada año
Según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística, en 2023 nacieron 56.728 bebés en la Comunidad de Madrid. De ellos, más de 40.000 correspondieron a familias con ambos progenitores dados de alta en la Seguridad Social, lo que las hace beneficiarias directas de la ampliación del permiso.
Para María José García, madre madrileña y trabajadora del sector sanitario, la medida “supone poder organizar mejor la vuelta al trabajo y repartir mejor las semanas entre mi pareja y yo”. Sin embargo, reconoce que “sin más apoyos en escuelas infantiles y ayudas a la conciliación, seguirá siendo difícil”.
Las críticas: un avance insuficiente para sindicatos y expertos
Desde la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) se valora positivamente la ampliación, pero se denuncia que el Gobierno “no ha desarrollado todavía el permiso parental retribuido de 8 semanas” que la Directiva europea también contempla.
La Comisión Europea ya había advertido a España de este incumplimiento, lo que motivó la urgencia de la reforma.
La CEOE, por su parte, ha alertado de que “las empresas, especialmente las pymes, necesitarán un periodo de adaptación y compensaciones económicas para asumir el coste de la ampliación”, según declaró un portavoz a El Diario de Madrid.
Juristas especializados, como el despacho Garrigues, recuerdan que el permiso sigue siendo intransferible, lo que evita que uno de los progenitores concentre todas las semanas, pero advierten de que “la flexibilidad en su disfrute requerirá una gestión más compleja para empresas y departamentos de recursos humanos”.
Comparativa europea: España avanza, pero no lidera
Con 19 semanas retribuidas por progenitor, España supera la media de la UE (que ronda las 14-16 semanas), pero queda por detrás de países como Suecia, donde la baja parental puede alcanzar los 480 días compartidos, o Estonia, que ofrece hasta 82 semanas combinadas de baja remunerada y no remunerada.
“El problema no es solo el número de semanas, sino cómo se retribuyen y la flexibilidad real para las familias”, explica Rosa Cañadas, consultora en políticas de igualdad laboral.
Próximos pasos: hacia las 20 semanas
La Exposición de Motivos del Real Decreto-ley 9/2025 reconoce que la ampliación a 19 semanas es “un paso intermedio” hacia las 20 semanas retribuidas comprometidas por el Gobierno. El Ministerio de Trabajo ha anunciado que esta mejora se abordará en la próxima legislatura, junto con la regulación definitiva del permiso parental de 8 semanas retribuidas.