La Comunidad de Madrid ha aprobado una nueva línea de ayudas económicas dirigidas a mujeres víctimas de violencia de género, dotada con un total de 700.000 euros. La medida, adoptada por el Consejo de Gobierno, contempla ayudas de pago único que oscilan entre los 3.420 euros —cuantía base equivalente a seis meses de subsidio por desempleo— y los 12.420 euros en casos especiales.
Estas subvenciones están orientadas a mujeres que, además de haber sufrido violencia, enfrentan grandes dificultades para acceder al mercado laboral y cuyos ingresos mensuales no superan el 75% del Salario Mínimo Interprofesional (SMI). La ayuda podrá incrementarse si la solicitante tiene menores o personas dependientes a su cargo, o si alguno de los miembros de su unidad familiar presenta discapacidad reconocida.
El objetivo de esta iniciativa es favorecer la integración social y laboral de estas mujeres, proporcionándoles un apoyo económico directo que les permita avanzar hacia una vida autónoma y libre de violencia. Las interesadas podrán tramitar su solicitud a través de los canales habituales de atención ciudadana de la Consejería de Familia, Juventud y Asuntos Sociales.
Este programa se enmarca en el desarrollo de la Ley Integral contra la Violencia de Género vigente en la región, la cual ha propiciado la creación de una amplia red de atención y acogida que incluye centros de emergencia, pisos tutelados, centros para víctimas de trata, mujeres jóvenes, reclusas y exreclusas, con 324 plazas residenciales disponibles.
Además, la Comunidad de Madrid dispone desde 2009 del Centro de Atención Integral a Mujeres Víctimas de Violencia Sexual (CIMASCAM), así como de dos Centros de Crisis abiertos 24 horas. A estos recursos se suman un centro pionero para ayudar a mujeres a abandonar la prostitución y otro especializado en atender a víctimas de violencia que tienen hijos con discapacidad intelectual.
Con estas actuaciones, el Gobierno regional busca reforzar su compromiso en la lucha contra la violencia de género, ofreciendo herramientas reales de apoyo y facilitando un entorno seguro para que las víctimas puedan reconstruir su vida con dignidad y autonomía.