En corto y por derecho

La kufiya de Arafat

Algunos crecimos con la imagen de Yasir Arafat, el creador de Fatah, con una kufiya que luego adaptaron desde los etarras hasta los independentistas catalanes, pasando por el inefable Zapatero. Conviene hoy recordar quién fue Arafat.

La cumbre de Oslo de 1993 fue el primer punto de inflexión que generó acusaciones de traición contra Arafat. El apretón de manos histórico entre Arafat y el primer ministro israelí Isaac Rabin fue visto por muchos palestinos como una capitulación fundamental. Las críticas se centraron en que Arafat había renunciado al 78% de la Palestina histórica a cambio de promesas vagas de autonomía en los territorios ocupados. Los grupos de resistencia palestinos, incluyendo Hamas, la Jihad Islámica Palestina y el Frente Popular para la Liberación de Palestina (FPLP), rechazaron categóricamente los acuerdos y los consideraron una traición al pueblo palestino. Hamas, en particular, condenó duramente a Arafat, declarando que los acuerdos constituían "una traición al Islam" y que legitimaban la existencia de la entidad sionista.

Una de las acusaciones más graves contra Arafat se relaciona con la corrupción sistemática y el desvío de fondos destinados al pueblo palestino. El Fondo Monetario Internacional encontró que entre 1995 y 2000, al menos 900 millones de dólares fueron "desviados" del presupuesto palestino a cuentas controladas por Arafat. Estos fondos, eran provenientes de ayuda internacional e impuestos palestinos. Mientras tanto, su esposa Suha recibía 100,000 dólares mensuales del presupuesto de la Autoridad Palestina y acumuló al menos 11.5 millones de dólares en cuentas bancarias suizas. Esta ostentación económica contrastaba dramáticamente con la pobreza creciente en los territorios palestinos

El sorprendente rechazo de Arafat a la oferta israelí en la Cumbre de Camp David del año 2000 que presidía Clinton, generó otra ola de críticas. Israel ofreció el 97% de Cisjordania, control total de Gaza, una capital en Jerusalén Oriental y el derecho de retorno para los refugiados palestinos al nuevo estado palestino. Las evidencias posteriores revelaron que Arafat había tomado la decisión de lanzar la Segunda Intifada inmediatamente después del fracaso de Camp David, contradiciendo las afirmaciones de que fue un levantamiento espontáneo.

Basten estas pinceladas del personaje para entender mejor lo que está hoy aconteciendo en Palestina.

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