La empresa municipal Madrid Calle 30 ha adjudicado las obras para la rehabilitación del último tramo de la pasarela peatonal que da acceso al Hospital Ramón y Cajal desde la calle de San Modesto. La actuación contará con una inversión cercana a los 415.000 euros y un plazo estimado de ejecución de seis meses, con trabajos que se desarrollarán mayoritariamente en horario nocturno para reducir las molestias.
Este tramo, situado sobre la vía de servicio de la M-607 en sentido Colmenar Viejo, conecta directamente con el pabellón docente y el módulo de consultas externas del centro hospitalario, siendo un punto clave de paso para miles de peatones cada día.
Seguridad estructural y modernización del equipamiento
La intervención tiene como objetivo garantizar la seguridad estructural y prolongar la vida útil de la pasarela, construida en 2005 con motivo de la ampliación del paso peatonal tras el nuevo enlace entre la avenida de la Ilustración y la M-607. El uso intensivo y el paso del tiempo han hecho necesaria una actuación integral sobre sus elementos constructivos.
Las obras incluirán la reparación de superficies de hormigón y del tablero metálico, la sustitución de barandillas y forjados más deteriorados, así como la renovación completa de la iluminación y la instalación de un sistema de monitorización estructural que permitirá controlar su estado en tiempo real.
Obras nocturnas y plan específico de movilidad
La pasarela de Ramón y Cajal es la más utilizada de toda la M-30, por lo que Madrid Calle 30 ejecutará la mayor parte de los trabajos durante la noche. Además, se elaborará un plan de movilidad específico previo al inicio de las obras, con el fin de minimizar las afecciones tanto al tráfico rodado como al tránsito peatonal.
Con esta actuación se dará por finalizada la rehabilitación integral de la pasarela, después de que en enero de 2023 se sustituyera el tramo que cruza la M-30 y conecta con el entorno de La Vaguada, el vano de mayor longitud de toda la estructura.
Una pasarela con historia desde el Mundial de 1982
El origen de esta infraestructura se remonta al Mundial de Fútbol de 1982, cuando se construyó una pasarela metálica para conectar el estadio Santiago Bernabéu con el Palacio de Congresos y facilitar el acceso de la prensa internacional. Tras el evento, la estructura fue reutilizada y dividida en dos tramos, dando lugar a la pasarela de Ramón y Cajal y a otra que conecta los distritos de Moratalaz y Puente de Vallecas sobre la autovía A-3.
La finalización de estas obras coincidirá, además, con el 120º aniversario de la concesión del Premio Nobel de Medicina a Santiago Ramón y Cajal, otorgado en 1906, reforzando el valor simbólico de esta infraestructura para la ciudad.
La M-30, eje clave de la movilidad urbana
La M-30 es la principal infraestructura de movilidad urbana de España, con un anillo de 32 kilómetros, de los que 22 discurren a cielo abierto y 10 son subterráneos, lo que la convierte en la red de túneles urbanos más extensa de Europa. Cada año registra 375 millones de desplazamientos y cerca de 487,5 millones de usuarios, consolidándose como la vía más transitada del país.
