Un grupo de aproximadamente treinta delegados de las juntas de personal docente, representantes de los sindicatos CCOO, ANPE, CSIF y UGT, ha decidido finalizar el encierro que mantenían en la Dirección del Área Territorial de Madrid-Capital desde el pasado martes. Esta decisión se debe a la convocatoria de una reunión por parte de la Consejería de Educación, Ciencia y Universidades, programada para la tarde de este jueves.
Según explicó Aida San Millán, secretaria general de la Sección Sindical Capital de CCOO, la decisión de levantar el encierro fue unánime. "Vamos a analizar las propuestas y decidir si es necesario adoptar nuevas medidas o si estas abarcan todas nuestras reivindicaciones", señaló. Por su parte, Miguel Ángel González, portavoz de CSIF Educación, comentó que ahora se encuentran a la espera de la reunión para tomar decisiones sobre los próximos pasos.
Motivos de las protestas
El encierro formaba parte de una serie de acciones colectivas, incluyendo huelgas y manifestaciones, llevadas a cabo durante los últimos meses para reclamar atención a las demandas del profesorado. Entre estas destacan:
- Reducción del horario lectivo: Los sindicatos exigen que en Secundaria pase de 20 a 18 horas y en Primaria de 25 a 23 horas.
- Equiparación salarial: Solicitan igualar los sueldos de los docentes de Madrid con los de otras comunidades autónomas.
- Elección de la jornada escolar: Rechazan la obligatoriedad de la jornada partida en nuevos colegios públicos, anunciada en septiembre por el Gobierno regional, y piden que esta decisión sea tomada por los consejos escolares de cada centro.
- Disminución de las ratios: Para ofrecer una atención más adecuada al alumnado.
- Reducción de la burocracia: Proponen un plan de choque que permita al profesorado enfocarse en su labor educativa.
Propuestas y descontentos
La Consejería de Educación había anunciado una reducción del horario lectivo en Secundaria a 19 horas para el próximo curso y a 18 horas en 2028, pero no ha considerado disminuir el horario en Primaria, lo que los sindicatos consideran una línea roja.
Asimismo, rechazan la medida que obliga a los nuevos colegios públicos a implementar la jornada partida, considerando que esta debería ser una decisión consensuada en los consejos escolares.
El contexto
Las tensiones entre los sindicatos y la Consejería se han mantenido durante más de un año debido a la falta de acuerdo sobre estas cuestiones. La protesta de los docentes busca lograr mejoras en las condiciones laborales del profesorado y, por ende, en la calidad educativa que se ofrece a los alumnos de la Comunidad de Madrid.
La reunión de esta tarde será clave para determinar si se alcanzan acuerdos o si los sindicatos retoman las medidas de presión en los próximos días.