El presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, presentará “a corto plazo” un plan migratorio que marcará la nueva línea ideológica de su partido tras el Congreso Nacional de julio. El documento contempla un endurecimiento del Código Penal para multirreincidentes, nuevas vías para la deportación individual de inmigrantes que cometan delitos, y la prohibición del burka y el niqab, siguiendo el ejemplo de países como Francia o Bélgica.
Inmigración como eje estratégico
La dirección del PP ha convertido la inmigración en uno de sus caballos de batalla políticos. Génova considera que existe un espacio de votantes descontentos con la gestión del Gobierno central, al que acusa de haber provocado un “caos migratorio”, y busca capitalizar ese descontento frente al auge de Vox.
El plan, coordinado por la vicesecretaria de Coordinación Sectorial, Alma Ezcurra, y el responsable de migración del partido, Rafael Núñez Huesca, se debatirá con los presidentes autonómicos del PP el próximo fin de semana en Murcia, una región donde las tensiones sociales por la inmigración han sido especialmente visibles.
Restricciones y condicionantes
Entre las medidas propuestas, el PP aboga por:
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Restringir la reagrupación familiar, que pasaría a ser “de carácter excepcional”.
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Condicionar la residencia de larga duración al conocimiento del idioma, la cultura y la cotización a la Seguridad Social.
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Primar la llegada de inmigrantes culturalmente cercanos y con capacidad de cubrir necesidades en el mercado laboral.
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Explorar fórmulas legales de deportación para inmigrantes condenados por delitos.
Feijóo ha defendido que “quien venga a contribuir tendrá los mismos derechos y obligaciones; quien venga a delinquir se irá por la misma puerta por la que entró”.
Debate sobre símbolos religiosos
El documento del PP reabre la discusión sobre los símbolos islámicos. Feijóo ha apostado por la prohibición del burka y el niqab por considerarlos “una negación simbólica y práctica de la libertad de las mujeres y un problema de seguridad”. En cambio, los populares descartan regular el uso del velo islámico (hiyab), desmarcándose así de Vox.
Menores extranjeros no acompañados
Uno de los puntos más sensibles del plan es la gestión de los menores migrantes no acompañados (menas). Feijóo defiende que el Estado financie su tutela en comunidades autónomas con centros saturados, aunque dirigentes locales del PP ya han suscrito pactos con Vox para no acoger nuevos menores o incluso promover su repatriación.
Contexto político
La inmigración figura actualmente como la segunda preocupación de los españoles, según el CIS. El PP busca recuperar terreno electoral en territorios como Cataluña, donde partidos con un discurso más duro sobre la inmigración, como Aliança Catalana, han crecido en las encuestas.
Con este plan, Feijóo aspira a equilibrar firmeza y moderación, intentando reforzar el espacio del PP frente a la presión de Vox y al mismo tiempo presentarse como alternativa de gobierno frente al PSOE.