Punto de resistencia

El día final de Osama

El 1 de Mayo de 2011, domingo para más señas, transcurría para mi como otro día normal. Ese día me correspondía ir al estudio de ESPN Deportes Radio en la ciudad de Miami, para comentar el juego de beisbol de domingo en la noche entre los Phillies de Philadelphia y los Mets de Nueva York, a celebrarse en el Citizens Ballpark de la ciudad de Filadelfia.

Como todos los domingos de esa temporada, terminé de alistarme a las 4 de la tarde y a las 5 ya estaba en la radio esperando el inicio del juego, pautado para las 7 y 05 pm. Me acompañaba en la transmisión Jose Fco. Rivera, excelente narrador Venezolano y figura de ESPN.

El juego comenzó ante una noche estrellada y despejada, el cielo daba el marco perfecto para lo que sucedería a partir de 2 horas después. En el comienzo del 6to episodio, un rumor de que algo estaba pasando en Estados Unidos era inminente, nosotros seguíamos narrando el juego sin saber a mas de 6 mil kilómetros de distancia, 24 Marines del Seal Team 6, estaban comenzando a ejecutar la operación de captura y eliminación del más grande perpetrador asesino y responsable de la destrucción de las Torres Gemelas de Nueva York, que además de asesinar a miles, se llevaba también la tranquilidad de este país.

Minutos después de ver a nuestros productores correr de un lado para otro en la radio, Dayromn Esmoriz, nuestro operador radial y jefe de la transmisión nos dice que había llegado un memorándum de la Casa Blanca anunciando algo miy importante.

Nuestra radio era en Español así que cuando saliera el Presidente Obama mi labor era en ese momento traducir al castellano para nuestra audiencia. El juego seguía rodando pero dejaba de ser importante.

A las 10 y 15 en el inning número 8, ya el rumor de que algo pasaba era demasiado grande y desde las oficinas de ABC Noticias en Inglés, llegaba un ruodo de que la situación tenía que ver con Osama Bin Laden y Pakistán. José Francisco y yo nos miramos a la cara sin entender mucho.

El juego estaba a punto de extenderse a extrainning, cuando cerca de las 11 y 20 de la noche nos abren una imagen de la casa blanca y vemos al Presidente Barack Obama acercarse a un podio que tenía 2 micrófonos. Rivera me da el pase y ante un silencio, sin escuchar no siquiera el ruido de ambiente del estadio escucho y casi automáticamente comienzo a hablar.

“Buenas noches, esta noche puedo reportar al pueblo Americano y al mundo , que los Estados Unidos han conducido una operación que ha eliminado a Osama Bin Laden, el lìder de Al Qaeda y el terrorista responsable de la muerte de miles de hombres, mujeres y niños”.

Mientras veía a mis compañeros abrazarse en medio de aquella noticia, mi mente cambió a un modo automático de transmisión, yo también quería gritar, pero mi deber era llevar la noticia de la manera más fidedigna posible. Cerca de 5 minutos duró el discurso del Presidente Obama y justo al terminar comienzo a escuchar de nuevo el audio de ambiente del estadio que gritaba desaforadamente “USA, USA” Con fanáticos de los 2 equipos celebrando juntos, la rivalidad deportiva daba paso a la celebración nacional. Cientos de miles de personas se lanzaron a la calle a clamar la llegada de la justicia, a llorar de alegría recordando a un familiar perdido en la tragedia ò simplemente a vivir ese momento de profunda vibra Americana.

Al final poco importó que el juego se hubiese extendido por catorce entradas. Manejando de vuelta a casa me detuve en un sitio a comprar una soda, para tomar algo y refrescar la garganta mientras reflexionaba de ese gran momento de la historia universal que me había tocado vivir. Nunca más cierta la frase de estar en el lugar indicado en el momento preciso.

Ese día murió Bin Laden y yo di la noticia en Español. A veces las cicatrices que te deja la vida no son malas. En este caso me dejaron un recuerdo imborrable.