El barrio de Retiro volverá a salir a la calle este domingo 14 de diciembre a las 12:00, con una segunda concentración vecinal en la Plaza de Daoiz y Velarde para exigir la reapertura inmediata del Polideportivo Daoiz y Velarde, cerrado desde agosto y convertido, según denuncian los colectivos convocantes, en símbolo de la “mala gestión” de los servicios públicos del distrito.
La protesta llega apenas dos semanas después de la multitudinaria concentración celebrada el 30 de noviembre, que evidenció el creciente malestar del vecindario ante un cierre que consideran injustificado. En esta ocasión, el respaldo ciudadano se amplía: más de una decena de asociaciones vecinales, culturales y de familias de centros educativos sostienen la convocatoria, lo que refuerza la idea de que el descontento se extiende por todo el distrito.
Entre los organizadores figuran las asociaciones de vecinos Los Pinos de Retiro Sur y Retiro Norte, los colectivos Socias Activas del Centro de Mayores Pérez Galdós, Súbete a la Nave, la asociación Hacenderas, así como las asociaciones de familias del alumnado de los institutos Isabel la Católica, La Estrella y Montserrat, y de los colegios San Isidro, Aguirre, Ciudad de Roma y José Calvo Sotelo.
Un polideportivo nacido de la lucha ciudadana
Los colectivos recuerdan que el Polideportivo Daoiz y Velarde es “uno de los centros neurálgicos del barrio”, fruto de una larga reivindicación vecinal. Los antiguos cuarteles militares de 1861 fueron cedidos al Ayuntamiento en 1989, pero durante años el espacio quedó abandonado pese a las demandas ciudadanas.
Entre 1990 y 2000, el movimiento vecinal logró que el recinto fuese rehabilitado y se abrieran instalaciones deportivas y culturales de uso público. Hoy, quienes protagonizaron esa victoria histórica sienten que el ciclo se repite: el polideportivo vuelve a estar cerrado y sin un calendario claro de reapertura.
“Años de abandono y excusas cambiantes”
En su comunicado, las asociaciones denuncian que la Junta Municipal de Retiro ha clausurado el centro “sin previo aviso ni explicaciones claras”. Primero se justificó el cierre en agosto; ahora, en una “supuesta avería de agua caliente”. Para los vecinos, cada versión es una excusa distinta que retrasa injustificadamente la reapertura.
A ello se suma la sensación de agravio comparativo con otros espacios municipales. Señalan, por ejemplo, la Nave de Daoiz y Velarde, un recinto de más de 7.000 metros cuadrados, que consideran “infrautilizado” o “reservado para eventos privados” en lugar de destinarse a necesidades del propio distrito.
Los colectivos también critican el deterioro de los servicios dirigidos a las personas mayores, recordando que “miles de mayores siguen sin actividades en los centros de nuestros barrios”.
Un cierre que afecta a la convivencia, la salud y la vida comunitaria
Para los vecinos, la pérdida temporal del polideportivo tiene un fuerte impacto en la calidad de vida de la zona. Lo describen como un espacio esencial para el deporte, la convivencia intergeneracional y la cohesión social, y consideran que su clausura supone “un ataque a derechos conquistados tras décadas de esfuerzo”.
Exigen su reapertura inmediata y denuncian un modelo de gestión urbana que, según afirman, “prioriza el turismo de alto nivel, los grandes eventos y la inversión especulativa sobre los servicios públicos de barrio”.
En su comunicado, concluyen con un llamamiento a la movilización:
“No permitamos la privatización de nuestros servicios y digamos NO a un modelo de ciudad pensado para una minoría.”
La concentración de este domingo será, aseguran, un paso más en una cadena de protestas que continuarán hasta recuperar el polideportivo que consideran fundamental para el distrito de Retiro.