La decisión, comunicada mediante una carta dirigida al ministro de Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, pone fin a una etapa marcada por una creciente tensión institucional.
Una renuncia forzada por la condena del Supremo
La dimisión llega tras la sentencia dictada por la Sala de lo Penal del Tribunal Supremo, que condenó a García Ortiz a dos años de inhabilitación especial, una sanción que le impide ejercer el cargo de fiscal general. Además, el tribunal le impuso una multa de 12 meses, con una cuota diaria de 20 euros, y la obligación de indemnizar a Alberto González Amador, afectado por la difusión de datos reservados.
La resolución del Supremo consideró probado que el fiscal general difundió información protegida en el contexto de un procedimiento judicial, lo que constituye una vulneración del deber de confidencialidad inherente al Ministerio Fiscal.
Comunicación oficial y procedimiento tras la renuncia
Fuentes de la Fiscalía General del Estado confirmaron que García Ortiz remitió su carta de renuncia este lunes, dejando en manos del Gobierno la elección de su sustituto.
La renuncia debe ser formalmente aceptada por el Ejecutivo y posteriormente publicada en el Boletín Oficial del Estado. A partir de ese momento, se abrirá el procedimiento para nombrar a un nuevo fiscal general, un proceso que requiere informe del Consejo General de la Abogacía y dictamen del Consejo General del Poder Judicial.
Contexto político y repercusión institucional
La salida de García Ortiz se produce en un momento especialmente delicado para la Fiscalía y para la relación entre el Gobierno y el Poder Judicial. Su condena ha generado un intenso debate sobre la independencia de las instituciones, el funcionamiento del Ministerio Fiscal y los límites de la responsabilidad de quienes dirigen organismos esenciales del Estado de derecho.
Diversas asociaciones judiciales y fiscales habían reclamado en los últimos días la renuncia del fiscal general, al considerar que su continuidad era incompatible con una condena firme por revelación de secretos.