Cárcel de Carabanchel

Reclaman que la declaración de Lugar de Memoria de la cárcel de Carabanchel incluya todo el terreno

La Plataforma por un Centro de Memoria de la Cárcel de Carabanchel pide que se amplíe el ámbito de protección a todos los vestigios del antiguo penal franquista

Terrenos de la antigua cárcel de Carabanchel
photo_camera Terrenos de la antigua cárcel de Carabanchel

La Plataforma por un Centro de Memoria de la Cárcel de Carabanchel ha reclamado este domingo que la reciente declaración de Lugar de Memoria Democrática por parte del Gobierno abarque la totalidad del terreno que ocupó el histórico penal, y no solo una parte de sus restos materiales. El colectivo considera que la delimitación actual “se queda corta” y que deben incluirse todos los elementos que formaron parte de la prisión, símbolo del terror del franquismo.

Una demanda de memoria completa

El antiguo penal de Carabanchel, construido con el trabajo forzoso de más de un millar de presos republicanos, fue durante décadas uno de los espacios más emblemáticos de la represión política en España. Su reciente declaración como Lugar de Memoria Democrática supone un reconocimiento histórico, pero la plataforma ha mostrado su disconformidad con el alcance limitado de la resolución.

“El Gobierno ha dado un paso importante, pero no señala con claridad que el Lugar de Memoria abarque la totalidad de los terrenos que en su día ocupó la cárcel”, denuncian los miembros del colectivo. En su opinión, es esencial proteger tanto la superficie donde se levantaba el edificio como los restos subterráneos de celdas, galerías y la sala del garrote vil, que aún subsisten bajo el terreno.

El CIE, una “cárcel encubierta”

La plataforma también ha reclamado el cierre del actual Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE), ubicado en lo que fue el antiguo hospital penitenciario de Carabanchel, al considerarlo una “cárcel donde se priva de libertad a personas que no han cometido delito alguno”. Según denuncian, mantener un centro de reclusión en un espacio de tanta carga simbólica “supone una ofensa a la memoria de las víctimas del franquismo”.

Los vestigios materiales que aún perviven

El decreto del Gobierno reconoce como vestigios materiales algunos elementos del antiguo complejo, entre ellos el propio CIE y restos subterráneos de galerías y celdas. Sin embargo, la plataforma critica que estos elementos no estén incluidos de manera explícita en la descripción del lugar ni en las medidas de protección y difusión previstas en el texto oficial.

“El sótano del centro de control, donde se encontraba la sala del garrote vil, debería formar parte del recorrido de memoria y recibir medidas de conservación”, subrayan los colectivos memorialistas.

Un espacio pendiente de justicia histórica

Desde el derribo de la prisión en 2008, los movimientos vecinales y de derechos humanos han reclamado de forma constante la creación de un Centro de Memoria, Derechos Humanos y Libertades en el lugar. La plataforma insiste en que el Gobierno debe aprovechar esta declaración para convertir el espacio en un referente pedagógico y de reparación histórica.

“Carabanchel no puede quedar reducida a una placa o a un expediente administrativo —afirman—. Es un lugar donde miles de personas fueron encarceladas, torturadas y ejecutadas. Debe preservarse íntegramente como símbolo de memoria y dignidad”.