La vicealcaldesa y delegada de Seguridad y Emergencias, Inma Sanz, ha visitado este martes el distrito de Latina para comprobar el funcionamiento del nuevo sistema de videovigilancia instalado en la calle Cullera, compuesto por 18 cámaras equipadas con inteligencia artificial (IA). Este sistema forma parte del plan del Ayuntamiento de Madrid para reforzar la seguridad en los barrios y modernizar la red de control urbano operada por la Policía Municipal.
Acompañada por el concejal del distrito, Alberto González, y mandos policiales, Sanz destacó que “la videovigilancia es una herramienta clave para mejorar la seguridad, prevenir delitos y reforzar la convivencia”. Según explicó, las nuevas cámaras cubren puntos estratégicos del entorno y facilitan la labor policial en tareas de vigilancia, detección de incidentes e investigación de posibles hechos delictivos.
Tecnología avanzada al servicio de la seguridad
Las cámaras de Cullera están dotadas con sistemas de inteligencia artificial que permiten realizar búsquedas más precisas y detectar comportamientos anómalos. En la actualidad, la Policía Municipal de Madrid opera 385 cámaras, de las cuales 101 (un 26%) ya incorporan esta tecnología. Con la instalación de las nuevas unidades en Latina, la capital incrementa su red de videovigilancia inteligente y mejora la capacidad de respuesta ante emergencias.
Sanz subrayó que el Ayuntamiento mantiene un diálogo constante con los vecinos y juntas municipales para identificar los puntos donde es necesaria la instalación de nuevas cámaras, siempre garantizando la viabilidad técnica y la utilidad policial.
“El objetivo no es solo reforzar la seguridad, sino también hacer que los vecinos se sientan más protegidos y mejorar la convivencia en nuestras calles”, explicó la vicealcaldesa.
Expansión del sistema en toda la ciudad
Durante este mandato, el Ayuntamiento ha instalado nuevos sistemas de videovigilancia en las plazas del Dos de Mayo (Centro) con 16 cámaras, Plaza Elíptica (Carabanchel/Usera) con 15, y Puerta del Sol, donde se han añadido 4 cámaras más. En las próximas semanas se activarán los sistemas de los parques El Calero (Ciudad Lineal), con 5 cámaras, y Pradolongo (Usera), con 14.
Cuando ambos proyectos estén operativos, la Policía Municipal pasará a gestionar 404 cámaras, de las cuales 164 (43%) se han instalado desde que José Luis Martínez-Almeida llegó a la Alcaldía.
La instalación de los sistemas en Cullera, Pradolongo y El Calero —que suman un total de 37 cámaras— cuenta con un presupuesto global de 1,3 millones de euros, de los que 555.500 euros corresponden al sistema de Cullera.
Protección de datos y control policial
Todas las cámaras cuentan con carteles informativos visibles para garantizar la transparencia ante vecinos y transeúntes. Las imágenes solo son supervisadas por agentes de la Policía Municipal y se almacenan temporalmente en el Centro Integrado de Señales de Vídeo (CISEVI), donde pueden ser revisadas en caso necesario. Además, cada sistema se activa únicamente tras recibir la aprobación de la Comisión de Videovigilancia, garantizando el cumplimiento estricto de la normativa sobre privacidad y protección de datos.
Nuevas zonas en proyecto
El Gobierno municipal tiene previsto ampliar la red de videovigilancia en otros puntos de la capital durante este mandato. Entre las nuevas ubicaciones destacan las plazas de Oporto (Carabanchel) y Jacinto Benavente (Centro), además de la renovación y mejora de los sistemas en Tirso de Molina (Centro) y en AZCA (Tetuán), una de las zonas de mayor afluencia de la capital.
“Madrid sigue avanzando hacia un modelo de ciudad más segura, moderna y conectada, en el que la tecnología se pone al servicio de los ciudadanos para mejorar su bienestar”, concluyó Sanz.