Absentismo laboral

CEIM y AMAT demandan priorizar la lucha contra el absentismo laboral en España

Miguel Garrido de la Cierva, presidente de CEIM y Pedro Pablo Sanz Casado, director gerente de AMAT, durante la presentación del Informe
photo_camera Miguel Garrido de la Cierva, presidente de CEIM y Pedro Pablo Sanz Casado, director gerente de AMAT, durante la presentación del Informe

El absentismo laboral derivado de las Incapacidades Temporales por Contingencias Comunes (ITCC) ha alcanzado niveles preocupantes, según se destacó en una reciente jornada organizada por la Confederación Empresarial de Madrid (CEIM) y la Asociación de Mutuas de Accidentes de Trabajo (AMAT). El evento, centrado en los nuevos costes laborales de 2025, reveló un aumento del 99% en los costes asociados al absentismo laboral en los últimos seis años, tanto en la Comunidad de Madrid como a nivel nacional.

Un coste económico desorbitado

En 2024, el absentismo laboral representó un gasto de 5.027 millones de euros en la Comunidad de Madrid, un incremento de 548 millones respecto a 2023. A nivel nacional, esta cifra ascendió a 28.987 millones de euros. Según los datos presentados por AMAT, este fenómeno está lastrando la competitividad de las empresas y comprometiendo la sostenibilidad del sistema de Seguridad Social.

Los procesos de baja derivados de contingencias comunes, como enfermedades no relacionadas con el trabajo, generan un doble impacto económico. De estos costes, 1.928 millones de euros corresponden a prestaciones económicas asumidas por la Seguridad Social, mientras que 1.158 millones recaen directamente sobre las empresas. En la Comunidad de Madrid, estas cifras son de 228 y 143 millones, respectivamente​.

Mutuas: la clave para una gestión más eficiente

Uno de los puntos clave del debate giró en torno al papel que las mutuas podrían desempeñar en la reducción de los tiempos de baja laboral. Actualmente, estas no pueden gestionar procesos relacionados con contingencias comunes, limitándose al ámbito de las contingencias profesionales. Sin embargo, las cifras respaldan su eficacia: mientras que las bajas laborales por patologías traumatológicas gestionadas por el Servicio Madrileño de Salud (SERMAS) tienen una duración media de 61 días, las gestionadas por mutuas en casos profesionales duran en promedio 37 días.

Miguel Garrido, presidente de CEIM, destacó que permitir a las mutuas participar en estos procesos podría reducir la duración de las bajas en 23 días en la Comunidad de Madrid y en 30 días a nivel nacional, lo que supondría un ahorro estimado de 371 millones de euros a nivel regional y más de 3.000 millones en todo el país​.

Un problema organizativo para las empresas

Además del impacto económico, el absentismo laboral genera problemas organizativos significativos para las empresas. La falta de personal incrementa la carga de trabajo del resto de los empleados y dificulta la planificación, especialmente en sectores donde la sustitución requiere personal cualificado. Este desajuste impacta directamente en la productividad y competitividad empresarial.

Propuestas y demandas

CEIM y AMAT hicieron un llamamiento a las autoridades para incluir este asunto como prioridad en la agenda política. Entre las propuestas destacan:

  • Colaboración con las mutuas: Permitir su participación en la gestión de bajas por contingencias comunes.
  • Simplificación administrativa: Reducir la burocracia para agilizar los procesos.
  • Fomentar la prevención: Implementar políticas para disminuir la incidencia de bajas laborales.
  • Sensibilización: Dar visibilidad al impacto del absentismo en la economía y en la organización empresarial.

Un reto social y organizativo

El absentismo laboral no solo representa un reto económico, sino también social y organizativo. La colaboración entre empresas, mutuas y administraciones podría ser clave para abordar esta problemática, mejorando la eficiencia del sistema y aliviando la carga financiera que recae sobre la Seguridad Social y las empresas.